El hombre que acabó con la vida de otro después del concierto de Karol G junto al Bernabéu, era miembro de la banda y yerno del líder del clan El Pablo, el principal traficante de Palma de Mallorca, viejo conocido de la policía, cumplió dos años de cárcel por tráfico de drogas. Ahora se enfrenta a 4 años de prisión por homicidio imprudente.
De cara al juicio, la familia del fallecido llama a colaborar a todos los testigos. Han reclamado la colaboración de testigos que pudieron presenciar este hecho para aportar cualquier dato en el proceso judicial contra el acusado, en libertad provisional tras declarar ante el juez.
"Hacemos un llamamiento urgente a todas las personas que pudieron ser testigos de este brutal ataque para que colaboren con su testimonio en el proceso judicial ya en curso; la cooperación ciudadana es crucial para esclarecer lo ocurrido", explica en una carta dirigida a la ciudadanía.
Cualquier detalle que ayude a esclarecer la agresión
La familia ofrece el correo electrónico justiciaparajuanfernandez@gmail.com para recabar cualquier detalle que pueda ayudar a esclarecer la agresión que concluyó con la muerte del joven que conversaba con su novia tras asistir a un concierto de la cantante colombiana en el estadio Santiago Bernabéu en Madrid.
"No hay malentendido que justifique una agresión de esta magnitud. Familiares y amigos estamos devastados por el fallecimiento de Juan y las circunstancias violentas en las que ocurrió. Tenemos el firme propósito de trabajar para que se haga justicia y para que, entre todos, evitemos que esto vuelva a suceder", indica el comunicado.
Los hechos tuvieron lugar hacia la una de la madrugada del 24 de julio en la confluencia de las calles del Padre Damián y la avenida de Alberto Alcocer.
Al parecer un grupo de chicas pensaban que la víctima, un hombre de 42 años, les estaba grabando con su teléfono móvil y le recriminaron su actitud, momento en el que el detenido, de 33 años, intervino y le golpeó en la cara.
El agredido cayó hacia atrás y se golpeó la cabeza con el suelo, lo que le provocó una fractura en la base del cráneo y falleció el mismo día en el hospital de La Paz en el que había sido ingresado.
Un juzgado de Madrid instruye la causa por la supuesta comisión de un delito de homicidio imprudente y ordenó la libertad provisional para el detenido con la prohibición de salir de España y la obligación de comparecer cada quince días en sede judicial.