El primer presidente del Congreso de los Diputados de la democracia (1977-1979) y Defensor del Pueblo de 1994 a 1999, Fernando Álvarez de Miranda, cuenta ya con una placa en la que fue su vivienda, en la madrileña calle del Profesor Waksman, que recuerda a quien "se empeñó en que la democracia en España fuese posible".
Así lo ha expresado este jueves en el acto de inauguración de la placa la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Junto a ella han estado presentes el tercer teniente de alcalde, Mauricio Valiente; el defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, la hija del homenajeado, María José Álvarez de Miranda, y Luisa, su viuda.
La regidora madrileña ha puesto de manifiesto lo "mucho" que hizo Alvarez de Miranda por Madrid, por lo que es un "grandísimo privilegio, un grandísimo tesoro" contar entre las calles de la capital con un recuerdo a su figura.
"Fernando fue de los que ya hablaban de democracia cuando el resto no lo sabíamos; fue necesario que hubiera profesores de su talla, personas de su temple, que se empeñó en que fuera posible la democracia en España. Si él no hubiera hecho lo que hizo, probablemente no tendríamos lo que tenemos", ha expresado Manuela Carmena. La jefa del Ejecutivo municipal ha alabado este "eslabón del recuerdo" que servirá para que los niños de ahora conozcan en un futuro la figura de Miranda.
Para Mauricio Valiente, el homenajeado es "un actor fundamental de la ciudad" que "hizo que Madrid y España fueran mejores". "El cielo nos ha dado una tregua con todo el sentido, porque Alvarez de Miranda lo merece", ha expresado.
Fernández Marugán ha destacado que Alvarez Miranda fue un "excelente presidente de las Cortes en un momento muy difícil". Además, ha destacado que era "un demócrata convencido" que "estuvo comprometido con los derechos humanos en América Latina".
"SOBREVIVE EN EL RECUERDO"
María José, la hija de Alvarez de Miranda, ha agradecido el homenaje y ha recordado que cuando una persona muere, "sobrevive si sobrevive en el recuerdo de los demás". "Tener memoria del otro, recordarlo, es dotarlo de existencia; todos ansiamos vivir aquí, y eso es la memoria", ha señalado.
Así, ha expresado que la viuda, hijos y nietos del homenajeado asumen "muy gustosos y honrados" preservar la memoria del primer presidente del Congreso de los Diputados. "Pero solo podemos hacerlo mientras dure nuestra existencia, y con la colocación de esta placa se facilita la pervivencia de su recuerdo en los madrileños", ha apuntado.