El Ayuntamiento de Madrid ha comenzado a tramitar el proyecto para comenzar las obras de rehabilitación del barrio del Aeropuerto, en el distrito de Barajas, donde se expropiarán 7.628 metros cuadrados de suelo para crear una zona verde central.
El Consistorio madrileño ha redactado ya los proyectos para obtener los terrenos que entran en período de información pública y ha anunciado además la construcción de un colector -el conducto en el que las alcantarillas vierten sus aguas- para evitar que, como ocurre en la actualidad, las calles se inunden cuando hay fuertes lluvias.
Además, la Junta de Gobierno ha aprobado la delimitación de este ámbito urbanístico, de 87.519 metros cuadrados para atender los daños en viviendas y el deterioro de los espacios públicos, como ha explicado en la rueda de prensa posterior el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo.
De esta forma, el Ayuntamiento madrileño sustituirá lo que actualmente es un aparcamiento no regularizado en un suelo privado por una zona de verde coincidente con el antiguo cauce del Arroyo de Rejas, implantará un edificio residencial de protección pública en la calle Garganchón y creará un área multifuncional con usos residenciales, comerciales y dotaciones en la calle mediana de Pomar. Además, se reurbanizarán los espacios libres entre los bloques.
De esta forma, el Gobierno local avanza en su proyecto de regenerar el conjunto de la ciudad y "fundamentalmente" aquellos barrios "más vulnerables", ha explicado Calvo.
La rehabilitación del barrio del Aeropuerto da respuesta, según el delegado, a un "abandono histórico" y por el que se ha ido degradando esta zona "olvidada por anteriores Gobiernos municipales".
El Consistorio ha sacado a información pública la expropiación del suelo -repartido en cuatro porciones de terreno- después de el que pasado 26 de abril se aprobase por unanimidad el Plan Parcial que reordena este ámbito urbanístico.
En este Plan se posibilita que los vecinos puedan acceder a las ayudas que ofrece para este barrio el plan de rehabilitación del Ministerio de Fomento y también las subvenciones municipales recogidas en el plan MAD-Re, por lo que, como ha destacado hoy el concejal de Ahora Madrid, no sólo se renovará el espacio público sino también las viviendas.
LA BIBLIOTECA DE SAN FERMÍN ESTARÁ LISTA EN 2019
La biblioteca de San Fermín, una de las reivindicaciones históricas del distrito de Usera, comenzará a construirse el próximo mes de febrero para estar lista en el verano de 2019, ha anunciado este jueves la portavoz del Ejecutivo municipal, Rita Maestre, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno. Es, como ha recordado, el primer proyecto participativo entre el Ayuntamiento y la ciudadanía: más de 400 personas, entre vecinos y técnicos municipales, consensuaron el pasado año el trazado del edificio, la distribución de usos o el diseño de la fachada.
La Junta de Gobierno ha autorizado el contrato de obras de construcción mediante tramitación anticipada del expediente y un presupuesto total de 4,9 millones de euros. El plazo de ejecución de las obras es de 18 meses, con fecha prevista de inicio el 1 de febrero de 2018, de manera que la biblioteca podría estar finalizada en verano de 2019. El gasto destinado al próximo ejercicio es de 2,3 millones de euros y en 2019 ascenderá a 2,6 millones.
La biblioteca se levantará en la avenida de San Fermín 8-10 en un terreno propiedad de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS). Responde a una antigua petición vecinal, respondida por el Ayuntamiento en 2015 dentro de su compromiso por poner en marcha bibliotecas municipales en distintos distritos de la ciudad de Madrid.
La futura biblioteca será un edificio de nueva construcción de 3.130 metros cuadrados construidos de tres plantas y un sótano, reservado a actividades orientadas a los más jóvenes. La edificación dispondrá de zonas de prensa y publicaciones, internet y multimedia, áreas de descanso-vending y un gran espacio de unos 270 metros cuadrados para zona infantil y bebeteca.
En la segunda planta se ubicará una sala de lectura y una gran terraza de 230 metros cuadrados, con áreas estanciales y cubierta verde. La de San Fermín será la primera biblioteca en incorporar un espacio libre de una parcela de 1.022 metros cuadrados a usos asociados a la biblioteca, que los vecinos han denominado 'biblio-plaza'.