Los numeros rojos ahogan el consistorio de Navalcarnero. Es uno de los municipios más endeudado de España. Y gran parte de la culpa, de esta deuda, la tienen la inversión en granito.
El ayuntamiento, gobernado hasta mayo, por el popular Baltasar Santos, se gastó más de 15 millones de euros en momumentos de granitos. Y el nuevo alcalde, al tomar posesión, se ha encontrado con el municipio en la ruina.
El estado de las cuentas con el que se ha encontrado el nuevo equipo de gobierno, el alcalde José Luis Adell, no facilita la tarea para enderezar un Ayuntamiento que a día de hoy no tiene liquidez para afrontar los pagos más básicos.
Un informe de la Intervención Municipal, situa la deuda del Ayuntamiento de Navalcarnero por encima de los 199 millones de euros, lo que supone cerca de 8.000 euros por habitante, y en él se tilda la situación financiera del consistorio como "no sostenible financiera y económicamente". El funcionario hace hincapié además en que durante el tiempo transcurrido no solo no se ha estabilizado, sino que se ha generado una deuda aún mayor.
Navalcarnero se ha caracterizado en los últimos años por los proyectos megalómanos de su anterior regidor, los cuales han costado varios millones de euros de dinero público, gastándose más de 15 millones en grantito.
De hecho, Baltasar Santos aprobó, en una de sus últimas decisiones al frente de la localidad de 26.000 habitantes, el pago de 1,9 millones de euros a un solo proveedor de granito para mobiliario urbano. El exalcaldeestá imputado en tres causas, razón por la cual Esperanza Aguirre le expulsó del partido aduciendo que había mentido sobre su imputación.