Las denominadas Banquetas del Jarama ocho zanjas que se cavaron en varias localidades de Madrid y Toledo, en los márgenes del Canal Real del Jarama, para depositar restos de la limpieza de sedimentos que habían sido contaminados radiológicamente por un vertido accidental.
Tal y como recoge el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), el 7 de noviembre de 1970 se produjo un accidente en el Centro de Nacional de Energía Nuclear Juan Vigón (en la actualidad Ciemat), en la Ciudad Universitaria de Madrid.
Se vertieron al exterior del centro, a través de la red de alcantarillado, unos 40 litros de líquidos contaminados con Cesio-137 y Estroncio-90. El vertido ocasionó la contaminación de lodos y sedimentos de la Real Acequia del Jarama.
Ahora el Ministerio para la Transición Ecológica abre la consulta previa, hasta el 17 de abril, previa a la elaboración del real decreto que regule los suelos contaminados radiológicamente.
El texto ministerial propone "la adopción de las medidas necesarias para la reducción de la exposición de la población a las radiaciones ionizantes que tengan como origen esos suelos".
Para ello se determinará "los sujetos responsables de la descontaminación y restauración y el establecimiento de las condiciones de ejecución y plazos para la descontaminación y restauración".
El Ministerio descarta dejar las cosas como están, obligados dicen por "la necesidad de reducir el posible impacto de la existencia de suelos contaminados radiológicamente, tanto en la salud de las personas como en el medio ambiente" y cumplir con la Ley que obliga a ello y data de 1964.
El CSN asegura que desde 1998 no se han producido cambios significativos de la situación de las Banquetas del Jarama ni tiene constancia de que se haya detectado contaminación o niveles de radiación anómalos en las zonas afectadas por el vertido accidental de 1970