Vecinos de Arroyomolinos han comenzado a movilizarse para exigir a las distintas administraciones públicas el desvío de la multitud de torres y líneas de alta tensión que atraviesan el centro del municipio y que, en algunos casos, "pasan a tan sólo 25 metros de las viviendas y colegios".
Este movimiento incipiente se encuentra en estos momentos intentando agrupar a todos los vecinos afectados en una asociación, con el objetivo de convertirse en un grupo de presión que obligue a los representantes públicos "a tomarse en serio la necesidad de trasladar las torres y líneas de alta tensión".También están buscando que esta reivindicación llegue al Pleno del Ayuntamiento, para que "todos los grupos políticos lo debatan de forma que queden reflejadas en las actas del Pleno de forma pública cuáles son sus intenciones y puntos de vista sobre este asunto", añade Amelia Noguera, vecina que lleva 20 años viviendo en Arroyomolinos.
Noguera insiste en que con esta movilización "no pretende buscar culpables" ni "enfrentar a los grupos políticos, ni mucho menos a los políticos con los ciudadanos", pero cree que es necesario mostrar, a quien tenga que actuar, que "hay un pueblo detrás reclamando una solución para estas torres y líneas".
"Prioridad" para el Ayuntamiento
Desde el Consistorio han explicado que para que la Red Eléctrica Española, la dueña de las líneas de alta tensión, pueda llevar a cabo el traslado se requiere la participación de varios organismos públicos y de un convenio entre las tres localidades afectadas: Móstoles, Moraleja de Enmedio y Arroyomolinos.
Un portavoz del Ayuntamiento de Arroyomolinos ha indicado a Telemadrid que este asunto es una "prioridad" para la actual alcaldesa, Ana Millán, quien "está buscando soluciones factibles para solucionar este problema, que le afecta también como vecina del municipio". Tiene en agenda el objetivo de convocar en breve una reunión con representantes vecinales para contarles en persona cómo está la situación y los pasos que el Ayuntamiento está dando al respecto. La idea es que en estos próximos cuatro años se pueda dar solución a este problema.
Hace ya doce años, en 2005, se firmó un convenio entre los tres municipios citados con el objetivo de encontrar una solución, pero ésta se ha ido dilatando en el tiempo, lo que genera "un problema bastante grave" en Arroyomolinos, el más afectado, ya que afecta a "todo el casco urbano".
Dicho convenio, para el que se aportaron en un principio alrededor de 3 millones de euros entre los tres municipios afectados, incluía un proyecto para desviar el actual trazado de las líneas de alta tensión fuera del perímetro urbano, aunque por distintas razones todavía no ha salido adelante.