Seis grandes hospitales madrileños incorporan nuevos equipos de cirugía robótica
Se suman a los que ya están en funcionamiento en tres hospitales
REDACCIÓN / EFE
El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha autorizado este martes una inversión de 24 millones de euros para disponer de seis nuevos equipos de cirugía robótica Da Vinci durante ocho años en la sanidad pública.
Los aparatos prestarán servicio en los hospitales de La Paz, 12 de Octubre, Ramón y Cajal, La Princesa, Puerta de Hierro y Gregorio Marañón.
Esta inversión forma parte del Plan de Equipamiento Sanitario y Alta Tecnología, dotado con 312 millones para los próximos ocho años años.
El presidente en funciones del Gobierno regional, Pedro Rollán, ha ofrecido estos datos en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.
Estos seis nuevos equipos en régimen de alquiler -modelo Xi IS4000, con una consola, simulador y mesa de operaciones- se sumarán a los tres que están ya en funcionamiento en los hospitales Clínico San Carlos, Rey Juan Carlos y Fundación Jiménez Díaz.
Robot Da Vinci
El Clínico opera desde 2006 con el primer robot Da Vinci que se instaló en España en un hospital público; en 2012, el Hospital Rey Juan Carlos abrió sus puertas con el segundo robot Da Vinci a la sanidad madrileña y el pasado mes de marzo, la Fundación Jiménez Díaz comenzó a operar con este equipo.
Además, el Hospital Clínico San Carlos se convertirá en centro de formación internacional en cirugía robótica para profesionales de Europa e Hispanoamérica, dentro del proyecto denominado 'Smart Health Center'.
El Clínico contará con una zona específica con otros tres robots Da Vinci que se utilizarán solo para docencia.Madrid contará con un total de doce aparatos de este tipo: los tres en funcionamiento, los seis de nueva adquisición y los tres para formación.
El Da Vinci es un dispositivo de cirugía asistida por ordenador que mejora la precisión de los gestos quirúrgicos realizados por los cirujanos en cirugía mínimamente invasiva endoscópica y laparoscópica.
Ofrecen visión 3D y mayor número de grados de libertad en los movimientos del instrumental, lo que compensa la pérdida del sentido del tacto.