El presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha asegurado que Cataluña "necesita una financiación basada en el concierto" económico.
Lo ha dicho este martes en la entrega de los Premis Pimes de Pimec, en la que también han intervenido el ministro de Industria y Comercio, Jordi Hereu; el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; el presidente de Pimec, Antoni Cañete, y, de forma telemática, el comisario europeo Thierry Breton.
Aragonès ha dicho que Cataluña debe acabar "con un expolio fiscal de 22.000 millones de euros al año, el 9,6% del PIB" catalán, y ha lamentado que Cataluña aporta el 19,2% de los ingresos del Estado y recibe el 13,6% del gasto.
Aragonès ha avisado de que no aceptará que le den "gato por liebre" ni tampoco "trampas" en la demanda de una financiación singular para Cataluña.
El presidente en funciones ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de un sistema de financiación para Cataluña que "ponga fin a un expolio fiscal absolutamente insoportable", de unos 22.000 millones de euros, ha dicho.
Reclama gestionar todos los impuestos
En su intervención en este acto, al que debía acudir inicialmente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, si bien finalmente se ha excusado por problemas de agenda, Aragonès ha agradecido a Pimec su compromiso con la reivindicación de la mejora de la financiación de Cataluña y ha reclamado gestionar todos los impuestos.
Ha insistido en que Cataluña necesita acabar con un modelo que le hace que entregue al Estado el 19,2% de sus ingresos y que reciba en cambio el 13,6% del gasto, y que reclama este nuevo modelo "para atender las necesidades" de Cataluña.
Al igual que hizo la semana pasada, cuando advirtió que no aceptaría maquillajes ni parches en la demanda de una financiación singular, Aragonès ha sentenciado que Cataluña no puede aceptar "trampas" ni que le den "gato por liebre", sino que necesita acabar con el "expolio fiscal".
"Las singularidades económicas son los déficit que sufrimos", ha dicho Aragonès, que ha sentenciado: "Necesitamos la llave y la caja, y avanzar hacia un concierto catalán".
Ha explicado que este concierto económico por el que apuesta es necesario para "poner los servicios públicos al día", así como mejorar las infraestructuras y acompañar al tejido productivo de Cataluña.
El presidente ha insistido en que Cataluña corre el riesgo de "tocar techo" y de estancarse si no cambia el sistema de financiación y ha tildado de insoportable la situación actual.