Felipe VI no participará "por razones de agenda" el próximo miércoles en el primer acto organizado por el Gobierno de Pedro Sánchez al cumplirse 50 años de la muerte del dictador Francisco Franco, pero se sumará a varios de los eventos previstos en el marco de ese aniversario, informan este viernes fuentes de la Moncloa y de Zarzuela.
Según apuntan las fuentes del Ejecutivo, el Rey y el Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, han tenido oportunidad de tratar este y otros asuntos esta semana y han constatado "su alineamiento al respecto". "Existe sintonía total", coinciden desde Zarzuela, según afirma la agencia Efe.
Entre los actos en los que participará el rey, desde el Ejecutivo destacan una visita institucional a los antiguos campos de concentración de Auschwitz y Mauthausen o un evento que conmemorará "el importante papel que jugó la monarquía en la Transición".
El Gobierno planea celebrar un centenar de actos y el primero, el del próximo miércoles 8 de enero, tendrá lugar en el Auditorio del Museo Reina Sofía a mediodía. Ese día, el Rey tiene previsto presidir la ceremonia de entrega de cartas credenciales de seis nuevos embajadores destinados en Madrid, entre ellos el británico, Alexander Ellis.
Será de hecho la presentación y lanzamiento de la iniciativa anunciada por Sánchez con el nombre de "España: 50 años en libertad", "una conmemoración oficial que celebrará la gran transformación social, económica y e institucional que ha experimentado nuestro país desde el inicio de la Transición en 1975".
Al evento, según Moncloa, ha sido invitada "una muestra amplia y representativa" de la sociedad española: empresarios, sindicatos, académicos, miembros del Gobierno y las Cortes, ONGs, asociaciones y demás entidades de la sociedad civil.
El PP no tiene previsto asistir y está convencido de que esos actos tienen una intención "más personal y partidista que simbólica y con sentido de Estado". Cuando lleguen al gobierno, aseguran desde Génova, ellos sí celebrarán "con respeto y unidad el 50 aniversario de la Constitución de 1978".
El presidente del Senado, el popular Pedro Rollán, tampoco asistirá al acto del 8, ya que está convaleciente de una intervención quirúrgica.
Vox tampoco asistirá a ninguno de los actos previstos por considerar que imponen "una visión única y divisiva del pasado", y que han sido diseñados "como señuelo para desviar la atención de la corrupción y la traición que representa este Gobierno".