Los 32 alumnos de una clase de 1º de bachillerato de un instituto La Salle de Palma han sido expulsados por colgar la bandera de España en apoyo a la selección española en el Mundial en el tablón de anuncios del aula. Las quejas de una profesora de catalán, que se negó a dar la clase con la bandera en el tablón e instando a que fuera retirada, provocó la expulsión de los alumnos, según publica ABC.
Al parecer, los alumnos pusieron la bandera con el permiso del director y del jefe de estudios, pero las quejas expresadas por parte de dos profesoras del centro que se negaron a impartir clase delante de la insignia nacional, provocó la expulsión de los estudiantes.
Una de ellas, fue la profesora de catalán quien ordenó este viernes a sus alumnos que quitarán la insignia. Tras negarse los alumnos a hacerlo, la profesora se fue de clase y media hora después regresó otra profesora para informarles que estaban todos expulsados sin notificarles el motivo.
Los alumnos justificaron el hecho de exhibir una bandera española en el aula con el argumento de que "contaban con el permiso del jefe de estudios" y relataron que la profesora de Catalán decidió suspender la clase y abandonar el aula.
Un padre de los alumnos ha denunciado en las redes sociales que la decisión de retirar la bandera española obedece a "connotaciones políticas".
"Han tratado de ensuciar un gesto espontáneo y deportivo. Los profesores de la Salle (el colegio de su hijo) han incumplido los protocolos al enviar a menores a casa sin comunicarlo a los padres", remarcó.
Los padres de los alumnos han puesto una reclamación al centro y ante la Inspección Educativa denunciando los hechos, al considerar que se trata de un mero capricho de la profesora que ha querido politizar el asunto.
Justificación de la expulsión
Al parecer, el centro ha enviado una circular a las familias de 1º B justificando la expulsión de los alumnos bajo el motivo de que habían "desoído las indicaciones de la profesora, que estaba cumpliendo con las normas de convivencia del centro y seguía las órdenes del equipo directivo".
El director técnico de Secundaria tras reconocer que todo partió "de una iniciativa por parte de los alumnos para decorar el aula en apoyo a la selección española" en el Mundial, "los alumnos, actuando como grupo, habían desoído las indicaciones de la profesora", lo que considera el centro "un acto de insubordinación deliberada".
El equipo directivo ha comunicado a los padres que se reunirá el lunes para estudiar el asunto y tomar medidas de carácter educativo "para fomentar la convivencia escolar y facilitar la prevención de conductas disruptivas".
