El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, criticó este miércoles el amparo del Tribunal Constitucional a Alberto Rodríguez, exdiputado de Podemos expulsado del Congreso tras ser condenado por golpear a un policía durante una manifestación, y su posición favorable con respecto al recurso del coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, quien pide revocar la sentencia que ordenó repetir el juicio por la constitución de Bateragune.
En este contexto, advirtió de que el Tribunal Constitucional manda “de forma consciente e intencionada” un mensaje al Supremo, al que le dice que “se ha convertido en un tribunal de instancia”.
En una entrevista en esRadio recogida por Servimedia, el jefe de la oposición constató de este modo su “perplejidad” ante la posición del tribunal de garantías en ambos casos, sobre todo por la “no existencia de antecedentes de que el Tribunal Supremo esté siendo corregido” y “suplantado por el Tribunal Constitucional”.
“Esto no solamente es grave”, dijo, “sino que el Tribunal Constitucional está probablemente de forma consciente e intencionada mandando un mensaje al Tribunal Supremo. Está diciendo que se ha convertido en un tribunal de instancia y que el Constitucional es el único que puede interpretar la Constitución y, además, puede revocar sentencias del Tribunal Supremo”.
Feijóo insistió en que no existen precedentes de una actuación similar por parte del Constitucional, lo que le “preocupa” aun “más” si se observa su “configuración”. Así, volvió a denunciar que hay “dos cargos del Partido Socialista en el Tribunal”, Juan Carlos Campo, exministro de Justicia con Sánchez, y Laura Díez, exdirectora general de Asuntos Constitucionales y coordinación jurídica del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática.
“Eso conlleva mucha inseguridad”, afirmó Feijóo, quien desveló que su partido está “estudiando y reflexionando con un grupo de juristas qué es lo que está pasando” con el Tribunal Constitucional.
Por último, el líder del PP denunció que el PSOE aplauda el amparo del Constitucional a Alberto Rodríguez cuando fue la socialista Meritxell Batet quien “expulsó a este diputado y entendió correctamente que este señor no podía ser diputado”. “El PSOE no tiene memoria, ya no en lo que ha venido haciendo en la última década, sino en lo que ha venido haciendo en las últimas semanas”, concluyó.