La líder de UPyD, Rosa Díez, se ha despedido emocionada de la dirección del partido en su último discurso como portavoz, haciendo un llamamiento para que nadie "arrebate" ni intente "reescribir" la historia de la formación, en alusión a los que buscan pactar con Ciudadanos.
Ovacionada en pie durante varios minutos por los cerca de trescientos militantes que asisten al congreso extraordinario del partido que renueva hoy al Consejo de Dirección, su intervención ha estado llena de continuas referencias a los afiliados, "lo único imprescindible" de UPyD, ha dicho.
También ha pedido "perdón" a quien haya podido ofender durante su mandato, que concluye hoy cuando los algo más de 4.000 militantes del partido voten a la nueva dirección para intentar remontar la profunda crisis interna que se desencadenó tras los últimos desastres electorales.
En un emotivo discurso, interrumpido por los aplausos entusiastas de los asistentes, Díez ha dejado claro que no venía hoy a despedirse, y que continuaría su viaje a "Ítaca", agradeciendo a sus compañeros el que le hubieran otorgado su confianza en estos años.
"Dios salve a los guerreros que son fieles a su pueblo", ha proclamado Díez, que ha insistido en que "lo único imprescindible" del partido son precisamente sus afiliados.
Ha reivindicado todo lo hecho por UPyD, un partido que ha "revolucionado" la política española y que ha entrado en la historia por haber traído al debate público cuestiones como la lucha contra la corrupción o la regeneración de las instituciones. "Nosotros hemos hecho política pensando en las próximas generaciones, no en las próximas elecciones", ha proclamado.
Por eso, ha apostado por no hacer "experimentos" sino trabajar con "honestidad" y sin "concesiones" para defender sus valores y sus principios, demostrando que se puede hacer un partido político "sin padrinos".
"Ahora que la política está esponsorizada, hemos trabajado con libertad y con autonomía y de eso tenemos que estar orgullosos", ha insistido Díez, que se ha felicitado de que UPyD haya conseguido representar a la "tercera España" siendo "gente limpia" y "resistente" y "con ambición de poder".
Ante los nuevos retos que se presentan en el horizonte y la incertidumbre electoral, Díez ha abogado por no olvidar la "firmeza de los valores" de su partido para que UPyD sea "digna" de la confianza que muchos españoles siguen depositando en sus siglas.
En su última intervención como portavoz de UPyD, Díez ha estado arropada por algunos de sus más íntimos y fieles colaboradores, como Carlos Martínez Gorriarán o la eurodiputada Maite Pagazaurtundua, que no ha podido evitar romper a llorar al escucharle.
Emoción no contenida que se ha podido ver también en la escolta de Rosa Díez y en otros asistentes al cónclave que se han acercado para besar a quien ha liderado el partido desde su fundación en 2007.
Los más de 4.000 militantes de UPyD tienen las 16.00 horas para votar por una de las cuatro candidaturas que aspiran a renovar la dirección del partido.
La candidatura "oficialista" y cercana a Díez, liderada por Andrés Herzog; la "renovadora" que encabeza la diputada Irene Lozano y otras dos, con muchas menos posibilidades, que han presentado José Antonio Rueda -exconcejal de Pozuelo- y Julián Manuel Domínguez, responsable de UPyD en Ceuta.