El que fuera interventor de la Junta entre los años 2000 y 2010 Manuel Gómez Martínez considera "inverosímil" la versión del expresidente de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán de que no conocía los informes de la Intervención General y ha aseverado que pedirá declarar de forma voluntaria ante el juez del Tribunal Supremo para aportar las pruebas que así lo demuestran.
En una entrevista en Onda Cero, Gómez, también imputado en el caso ERE por la juez Alaya, ha explicado que la Intervención General "no estaba perfectamente al tanto" de lo que ocurría en la Consejería de Empleo porque "no podía fiscalizar las subvenciones" que gestionaba este departamento y que fue a través de las auditorías que realizaba al Instituto de Fomento de Andalucía (IFA) como se detectó que había un área de gestión pública "sin control de la Intervención".
El resultado de esas auditorías, según ha detallado, fue comunicado a tres miembros del Gobierno de la Junta, los consejeros de Empleo, Hacienda e Innovación porque ellos "eran los destinatarios legales" de las mismas.
Así las cosas, Gómez establece una diferencia entre la situación de Griñán y la de Manuel Chaves porque en el periodo en el que ocurrieron los hechos, este último fue "presidente y solo presidente" de la Junta y es "perfectamente posible" que "ninguno de los tres consejeros hubieran considerado necesario darle traslado del contenido de los informes".
Sin embargo, Griñán, como consejero de Hacienda, "sí fue destinatario de estos informes", ha subrayado el exinterventor, que ha indicado que, si tiene la oportunidad, aportará al juez que instruye a causa en el Supremo, Alberto Jorge Barreiro, "una serie de documentos de que es inverosímil que Griñán no estuviera al tanto del contenido de los informes de la Intervención General".
Además, el funcionario ha explicado que los informes a los que se hacen referencia no eran eventuales, sino que se realizaban varios cada año, por lo que si "durante años al consejero no le llegó ninguno, también merece juicio que no pregunte por ellos".
LA "ESTRATEGIA" DE CULPAR AL INTERVENTOR
Con respecto a su propia imputación y a su supuesta responsabilidad por no haber realizado los informes de actuación, ha dicho que los interventores realizaron controles incluso por encima de la exigencia legal y considera una "estrategia", diseñada por la "alta dirección del Gobierno andaluz y del PSOE", que se le eche la culpa a él. "Es la gran excusa de siempre".
Gómez ha explicado que el informe de actuación es "un mecanismo para cuando se detecta el menoscabo de fondos públicos, que es un concepto específico de derecho financiero equivalente a responsabilidad contable", y ha reiterado que en el desempeño de su trabajo la Intervención no sospechó de un menoscabo de fondos públicos, pero sí emitió "otros informes sobre irregulares muy serias", concretamente sobre "un déficit que podía poner en peligro el objetivo de estabilidad y sobre la gestión de subvenciones de forma tan irregular que podrían ser declaradas nulas de pleno derecho".
"No procedía hacer un informe de actuación y así lo han ratificado tres interventores y la Cámara de Cuentas", ha mantenido el exinterventor que considera que el informe de actuación "habría corrido la misma suerte que los informes emitidos", es decir, "quedar en un cajón".
"CUMULO DE INVENCIONES"
Preguntado por si le diría al juez del Tribunal Supremo que no se crea la declaración de los dos expresidentes, Gómez ha dicho que, en particular, la de Griñán fue "un cúmulo de invenciones", aunque ha aseverado que también le ha sorprendido que la realizada este martes por Chaves fuera "en la misma dirección".
Además, considera que "llama la atención" que Chaves haya repetido que el interventor no le dirigió ninguna advertencia cuando "sabe que el interventor no se dirige a su presidente sino a su consejeros". "Parece reprochar al interventor que no le dirigiera advertencia pero no hace ningún reproche a los miembros de su Gobierno", ha concluido.