Tras las altas temperaturas de los meses de primavera y las fuertes lluvias del pasado mes de junio, junto a las recientes olas de calor ya protagonista del verano, alimentos frutícolas como el melón y la sandía escasean.
La Unió Llauradora calcula que las perdidas directas para los productores de la Comunitat Valenciana de melón y sandía rondarán esta campaña los 44 millones de euros como consecuencia de una "concatenación de problemas meteorológicos que han provocado una reducción de cosecha a la mitad en ambos cultivos".
Según las estimaciones de la organización profesional agraria, los productores de sandía perderán 27 millones de euros y los de melón, 17 millones de euros.
La cosecha de sandía, detallan, "difícilmente" superará la cantidad de 35.000 toneladas, lo que supone un descenso del 52% en relación a la pasada campaña y de un 63% sobre la media de las últimas 15. En cuanto a la producción de melón oscilará sobre las 17.000 toneladas, que representa un descenso respecto a la campaña pasada del 53% y en relación a la media de los últimos 15 años del 62%.
Por su parte, la Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA) explica como “en la campaña 2022 la superficie de sandía fue de 21.600 toneladas menos que la campaña precedente, donde se plantaron 23.968 toneladas”. Además, destaca que la caída de la producción se debe principalmente al clima extremo “concretamente 1.163.589 toneladas por debajo de la media de las últimas campañas que se sitúa en 1.204.563” señala la asociación.
Por otro lado, la superficie sembrada de melón es de un total de 16.221 hectáreas, es decir, un 15% inferior que la anterior campaña “es una de las más bajas de los últimos 15 años” según ASAJA.
Estas frutas son las más relevantes de la estación por su alta capacidad de hidratación por su elevada composición por agua, esencial para combatir el calor. Sin embargo, algunos supermercados ya hablan de su notoria insuficiencia.
De hecho, Mercadona ha avisado de los problemas y dificultades que está atravesando para suministrar a comunidades como Madrid e Islas Baleares, y avisa sobre la materialización del asunto con el aumento de los precios.
Principales motivos
Entre las causas de la escasez, los agricultores apuntan, en primer lugar, a la sequía y los cambios bruscos de temperatura sufridas en los últimos meses en el campo español.
En este sentido, Asaja señalan que a campaña originalmente comenzó satisfactoriamente en el mes en abril, pero a raíz de las lluvias torrenciales los cultivos fueron dañados. Los agricultores dice no haber sembrado al mismo nivel que años anteriores por respeto al incremento de la sequía.
Las bajas cantidades del producto han forzado la importación desde Brasil y Senegal de melón y para la sandía desde Marruecos y Mauritania, provocando la desaceleración del mercado nacional.
Sin embargo, desde ASAJA esperan una resolución optimista y valoran “las posibilidades de mejora cuando las condiciones climáticas mejoren debido al posible aumento de la demanda, tanto en melón como en sandía”. Y, esperan "que el consumo las exportaciones se reactiven, permitiendo que el mercado se recupere".