El módulo de aterrizaje inteligente para investigar la Luna (SLIM), lanzado al espacio por Japón el 6 de septiembre, ha completado la transición de la órbita terrestre para dirigirse hacia el satélite.
La maniobra fue completada con éxito este fin de semana y el estado de la nave espacial es normal, según informó la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) este 2 de octubre. Está previsto que la inserción en órbita lunar se produzca el 4 de octubre.
Su viaje a la Luna durará entre 4 y 6 meses y de tener éxito será la sonda más pequeña en llegar a la superficie del satélite, con 1,5 por 1,5 por 2 metros.
SLIM es la primera misión japonesa a la superficie lunar, y pretende demostrar un aterrizaje lunar preciso.
En su descenso a la Luna, el módulo de reconocimiento reconocerá los cráteres lunares, utilizando la aplicación de tecnología de los sistemas de reconocimiento facial y determinará su ubicación actual utilizando datos de observación recopilados por el orbitador lunar SELENE.
La misión apunta a un rango de precisión de 100 metros en el borde de un cráter llamado Theophilus, cerca del Mar del Vino Sagrado.
En comparación, la precisión del módulo lunar Eagle del Apolo 11 era una elíptica que tenía 20 kilómetros de ancho en rango descendente y 5 kilómetros de ancho en rango cruzado.
La pequeña nave cuenta en su interior con el róver LEV-1 que se espera pueda transmitir señales desde la Luna.