El papa Francisco dijo que los nuevos cardenales de la Iglesia Católica deben tener un "fuerte sentido de la Justicia", les instó a practicar la caridad y a "amar sin límites" con "fidelidad a las situaciones particulares".
El pontífice dijo que quien asume esa distinción debe tener "un fuerte sentido de la Justicia, de modo que no acepte ninguna injusticia", poco antes de crear a quince nuevos cardenales electores y cinco no electores en una ceremonia en el Vaticano.
El Papa argentino les dijo antes de imponerles el capelo cardenalicio y darles el anillo que les distingue como "príncipes de la Iglesia" que la "caridad" tiene que ser la pauta de su trabajo.
Bergoglio aseguró que la caridad significa ser magnánimo y benevolente y dijo: "la magnanimidad es, en cierto sentido, sinónimo de catolicidad, es saber amar sin límites, pero al mismo tiempo con fidelidad a las situaciones particulares y con gestos concretos".
El Papa les instó a "amar con gestos de bondad" y llamó a "querer el bien, siempre y para todos, incluso para los que no nos aman". Advirtió que los cardenales no están inmunes a la tentación de la envidia y el orgullo y para vencerla reiteró su apelación a la caridad.
El Papa aseguró que el cardenalato es "una dignidad, pero no una distinción honorífica" y recordó a los cardenales que "la Iglesia que está en Roma" tiene un papel ejemplar y su fin es la caridad pero también tiene ese objetivo "toda Iglesia particular, en su ámbito".
Bergoglio alertó a los cardenales en su homilía contra el peligro de "enojarse" y consideró que, "aunque es posible entender un enfado momentáneo que pasa rápido, no así el rencor".
Por último, el pontífice recordó a los nuevos purpurados que deben ser "incardinados y dóciles"; "incardinados en la Iglesia que preside en la caridad, dóciles al Espíritu Santo, que derrama en nuestros corazones el amor de Dios". A continuación, el papa Francisco procedió a crear uno a uno a los nuevos cardenales.
En la lista de nuevos cardenales están el arzobispo español de Valladolid, Ricardo Blázquez, además de Alberto Suárez Inda, arzobispo de Morelia (México); el también español José Luis Lacunza Maestrojuán, arzobispo de David (Panamá), y Daniel Fernando Sturla Berhouet, arzobispo de Montevideo (Uruguay).
El arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, se convierte en el cuarto cardenal de la historia de la Diócesis vallisoletana 104 años después de que el arzobispo José María De Cos y Macho fuese nombrado purpurado en 1911.
El Papa Francisco anunció el pasado 5 de enero, ante los feligreses congregados en la plaza de San Pedro, que nombraría a quince nuevos cardenales, entre los que se encuentra Ricardo Blázquez, presidente de la Conferencia Episcopal Española desde marzo de 2014 y arzobispo de Valladolid desde marzo de 2010.