La Guardia Civil mantiene abierta una investigación para aclarar las circunstancias del robo de entre 50.000 y 60.000 litros de aceite de oliva virgen extra en una almazara del municipio cordobés de Carcabuey, por el que de momento no ha practicado detenciones.
Un portavoz del instituto armado ha informado este jueves a EFE de que el robo, que tuvo lugar en la madrugada de este miércoles, fue denunciado después de que los responsables de la almazara se percataran de la sustracción del "oro líquido".
Una vez que la almazara contactó con la Guardia Civil, los agentes verificaron el robo y se inició de forma inmediata la correspondiente investigación para tratar de determinar la autoría del mismo. En concreto, el instituto armado llevó a cabo una exhaustiva inspección técnico ocular y trata de aclarar las circunstancias del robo para verificar, entre otros extremos, qué tipo de vehículo se utilizó para transportar una cantidad de aceite tan importante.
El mismo portavoz ha apuntado que el robo se ha producido en un contexto de mercado en el que el precio de este producto es muy elevado, y el hecho de que su sustracción haya sido "a granel" (no embotellado) puede complicar su trazabilidad o el seguimiento de su posible venta.
Según la Guardia Civil, la zona en la que se produjo el robo se encontraba "cerrada", por lo que tuvo que ser forzada, y dada la cantidad de litros sustraídos los autores debieron emplear un tiempo destacable para llevarlo a cabo.
La sustracción del aceite se produjo en la almazara Marín Serrano "El Lagar", una empresa de origen familiar dedicada a la fabricación y envasado de aceite de oliva virgen desde 1968 y cuyos responsables continúan este jueves en contacto con la Guardia Civil y con el seguro, según han indicado a EFE desde esta firma.
Un robo "muy bien organizado"
El gerente de la empresa, Martín Parra, ha advertido de que "esto es un encargo o algo", a lo que ha agregado que "cuando se realiza una compra-venta, las cisternas llevan su documentación, donde sale de dónde es el aceite, el lote, la trazabilidad, las matrículas, el que paga y donde va el aceite", de manera que "las cisternas están circulando sin papeles y alguien tiene que comprarlo y necesita esos papeles para darlo de alta", ha subrayado.
Mientras, ha confesado que "jamás" se podría imaginar lo ocurrido, que ha calificado como "de película", con "todo super bien preparado y con daños mínimos, perfección total, sabían cargar, sacar todo, cortaron la luz y sabían dónde estaba la alarma para que no saltaran", al tiempo que "han cargado en camiones desde distintos depósitos", con "la casualidad que es el mejor lote que tenía en la bodega", ha lamentado el gerente.
Además, ha resaltado que "han cogido mangueras, han cargado y después han puesto las mangueras hasta bien", de modo que "no las dejaron tiradas", por lo que "es gente que sabe lo que hacía", ha remarcado, para aseverar que las pérdidas "para una empresa pequeña es una bestialidad", porque "al precio de mercado que está este tipo de aceite es sobre 500.000 euros".
Entretanto, el gerente de la almazara ha comentado que tienen cobertura de seguro y "ahora toca la parte de negociación, a ver si por ahí se puede salvar algo".