Antonio y Mari, de 84 y 80 años, llevan viviendo 22 años en su vivienda alquilada que "era de promoción pública". En el año 2000, el matrimonio entró a vivir en ese piso en el municipio de Alcorcón con un precio asequible, pero al finalizar la protección de la vivienda, "el fondo buitre Blackstone compró toda la promoción" y ahora plantea subir a todos los inquilinos un 40% los alquileres.
Antonio cuenta que entró pagando 200 euros y ahora ya son 621 euros, "solamente con una pensión que no da" y "resistiendo con la ayuda de mis hijos". En su opinión, "es incomprensible que en una vivienda de protección oficial estemos pasando este calvario". Declara que el fondo Blackstone le ha ofrecido "una prórroga y un piso de un dormitorio, cuando lo tengan" y Antonio señala que "habla en nombre de todos los vecinos" que están "en esa lucha".
La protección "terminó" tras cuatro años de alquilados, "cuando el contrato pasó de 200 a 400 euros", explica Antonio. "Al principio pensé que daba igual quién fuera el casero, pero con cada contrato se hace insostenible".