El chino está de moda. Ya lo estudian unas 5.000 personas en España y cada vez tiene más demanda, sobre todo entre universitarios que quieren añadir un idioma a su curriculum o empresarios que desean emprender negocios allí. Pero también existen alumnos que lo estudian por gusto o porque quieren viajar y relacionarse con la gente del país.
Acudimos a una de las academias donde se imparten clases de chino, en plana Gran Vía. Y nos damos cuanta de la complejidad que tiene, sobre todo en la pronunciación y la caligrafía, además de los tonos que matizan o cambian el significado de lo que decimos. Para hablar el chino perfectamente son necesarios entre ocho y diez años de estudio.
