No es la primera, ni será la última, vez que la batería de un teléfono móvil se hincha por sobrecalentamiento y termina explotando. Este es el caso de Peluso. Iba en dirección al coche y a los 50 metros escuchó una explosión en su coche. Al intentar coger la caja que contenía la batería y evitar que ardiera el vehículo se le quemaron las manos. Peluso, un vecino de Villamanta, tiene quemaduras de segundo grado, pero pudo ser peor...