El renacer del esparto en Villarejo de Salvanés: de las cuerdas del campo a las galerías de arte contemporáneo
Del campo a las galerías: el esparto resurge como material artístico y símbolo de sostenibilidad
‘Habitar el esparto’: el proyecto que revitaliza una tradición milenaria y la vincula con el arte contemporáneo y la educación
REDACCIÓN
En Villarejo de Salvanés pueden presumir de poseer un tesoro de raíces ancestrales que, tras haber sido el motor económico de la región durante décadas, está resurgiendo con una nueva vida: el esparto. Esta fibra natural, obtenida de las gramíneas, fue durante años un material imprescindible para la elaboración de cuerdas y utensilios agrícolas, y ahora vuelve a ocupar un lugar de relevancia, pero esta vez en el mundo de la artesanía y el arte contemporáneo. Te lo contamaos en ‘Aquí se hace’.
Durante la postguerra, Villarejo de Salvanés llegó a contar con más de 50 fábricas dedicadas a la producción de cordelería, siendo el esparto el principal recurso para atar las mieses de trigo y cebada. Hoy, lejos de quedar relegado al olvido, este material ha encontrado nuevos usos en las manos de artistas y artesanos que buscan revivir esta tradición milenaria.
Nuestra primera parada en Villarejo de Salvanés es con Antonio y Julián Díaz, dos artesanos que redescubrieron el esparto durante la pandemia. “Antes se fabricaba para hacer cuerdas para las mieses de trigo o de cebada, también se hacían seras para llevar aceitunas y uvas. Entonces se hacían cosas para el campo, pero hoy en día se hacen piezas más elaboradas, más artesanas”, explica Julián. La vuelta al esparto no solo ha sido una forma de preservar una tradición, sino una manera de adaptarla a los tiempos actuales, donde lo artesanal y lo sostenible han ganado protagonismo.
El proceso comienza con la recogida de la fibra, que luego se somete a un remojo para suavizarla y, tras secarla, se pasa a la fase final de hilado, una técnica ancestral que lleva practicándose en la Península Ibérica desde hace más de 30.000 años. Este oficio, que antaño formaba parte del día a día rural, está viviendo un nuevo impulso gracias a iniciativas como el taller de esparto y segadores, impartido de forma gratuita en la Casa de la Tercia. Todos los sábados, el taller abre sus puertas con un claro objetivo: transmitir este saber tradicional a las nuevas generaciones y evitar que caiga en el olvido.
'Habitar el esparto’: un proyecto para reconectar con el pasado
En 2019, Villarejo de Salvanés dio un paso más hacia la recuperación de su identidad con la creación del proyecto ‘Habitar el esparto’, una iniciativa cuyo propósito principal es devolver el protagonismo al esparto y reconocer la importancia de las personas mayores, quienes atesoran los conocimientos sobre este oficio. “Tiene también una repercusión pública de reconocimiento de un sector de la sociedad como son los mayores, que a veces quedan en un lado marginal cuando tienen muchísimo que enseñarnos”, señala Esther San Vicente, directora del proyecto.
Además de los talleres que buscan enseñar a las nuevas generaciones, el proyecto ha abierto la puerta a colaboraciones con museos, artistas contemporáneos y universidades, generando un espacio de intercambio entre lo tradicional y lo moderno. “La idea es continuar con el proyecto, en esta línea de conexión con los artistas contemporáneos, con las universidades y los investigadores que se interesan también por el medio ambiente y el uso de nuevos materiales”, añade San Vicente.
El esparto como expresión artística
El interés por el esparto ha traspasado las fronteras del campo para colarse en el mundo del arte. Artistas como Sonia Navarro han elevado esta fibra a la categoría de arte contemporáneo. Esta innovación en el diseño ha permitido que el esparto llegue a eventos de prestigio internacional, como la Feria ARCO, donde ha sido presentado como un producto de lujo y una expresión artística en sí misma.