Juan José Badiola, director del Centro de Enfermedades Transmisibles y Emergentes de la Universidad de Zaragoza, piensa que aunque la tercera ola comienza a declinar hay que estar muy atentos a la cepa británica. “Parece que el número de casos se estabiliza incluso que descienden, creo que será la tendencia de febrero, pero lo que pase después no lo sé. Dependerá de la propagación de la cepa británica, si podría provocar un pico de casos”.
A Juan Pablo Colmenarejo en Buenos Días Madrid le explica que “la tercera ola está claramente relacionada con las navidades y prenavidades, con la relajación de las fiestas y las compras. Y eso a pesar de que muchos han hecho caso a las recomendaciones”.
La cepa británica es más contagiosa
“La cepa británica es entre un 40-70% más contagiosa pero no está demostrado que la patogenosidad sea peor. Lo que ocurre, es que cuando se incrementan los contagios, una parte de ellos acaba en las UCIS”.
“Tenemos una imagen parecida a la de marzo pero con una diferencia- continúa- el número de fallecimientos es menor gracias al aislamiento de las residencias de ancianos, que conocen la situación y están mejor preparados. Además, van a ser los primero en inmunizarse”.
A la pregunta de si habrá una cuarta ola en marzo, Badiola asegura que no puede anticiparse. “Pero no se descarta. Es época de frío y depende del comportamiento de las personas. Está en nuestras manos pero habrá que ver lo decisivo de la expansión de la cepa británica, y de otros, como la sudafricana y brasileña que también preocupan”.
El profesor asegura que Madrid tiene muchos riesgos debido al aeropuerto, pero también que no hace falta, de momento, un confinamiento domiciliario. “Con las medidas actuales parece que aparentemente la epidemia habría alcanzado el pico máximo. Yo lo habría hecho antes de las navidades, pero ahora un confinamiento domiciliario puede traer consecuencias que no son buenas”.
Confianza en la vacunación
Con respecto a los nuevos medicamentos para luchar contra la Covid, tiene esperanzas en que funcionen. Y sobre las vacunas, cree que se ha hecho poca pedagogía. “Sin embargo, la expectativa de vacunarse se ha incrementado mucho. Antes casi el 60% de la población no pensaba vacunarse. Pero este último mes, los ciudadanos han comprobado que no hay reacciones adversas temibles. No ha pasado nada. La gente ha ganado confianza y han visto que la mejor forma de luchar contra una enfermedad infecciosa es la vacunación”.