Un químico asturiano inventa un antiorín para mascotas totalmente inocuo
Redacción
Las deposiciones sin recoger y los orines de los perros se han convertido en un quebradero de cabeza para particulares pero sobre todo para comerciantes y corporaciones municipales que tienen que hacer frente a cuantiosas facturas por los daños producidos en el mobiliario urbano.
Un problema para el que ha nacido un producto "antiorines" que resulta inocuo para los animales y personas y eficaz para los humanos. Lo ha ideado David Hevia, un químico asturiano fundador de la empresa Diecolpet: "Monté un pequeño laboratorio y me puse a probar soluciones hasta conseguir la fórmula", cuenta en Buenos Días.
¿Cómo se le ocurrió esta idea al químico asturiano? Hace un tiempo su mujer y él se compraron una casa en una pequeña aldea de Asturias llamada Canzana. Una casa que había estado prácticamente abandonada en una zona donde todos los perros del pueblo acudían a hacer sus necesidades. De ahí que primero se interesara por los productos que había en el mercado como "repelentes" para disuadir a los animales a hacer sus deposiciones.
El problema era la toxicidad de esos productos, tanto para los animales como para las personas. Fue cuando empezó a investigar para encontrar un producto que "espantara" a los animales a la hora de hacer sus necesidades y que fuese inocuo para ellos. Y lo consiguió"Estoy muy sensibilizado con la toxicidad de cualquier producto", nos cuenta.
Este producto promete ahorrar mucho dinero a los consistorios por lo que significa evitar que los canes orinen de manera continuada en las fachadas de los edificios, los bancos de los parques, etc: "el poder corrosivo del orín de los perros está haciendo mucho daño a las arcas de los ayuntamientos porque constantemente tienen que reparar y a veces hasta reemplazar y mobiliario urbano"
'SinPis' es un concentrado que se diluye en el agua antes de su aplicación. Se usa sobre las superficies donde los perros vuelven a orinar (acuden al olor) y se aplica en todo tipo de superficies. El modo de uso es muy sencillo: se pulveriza el producto sobre tela, sobre ropa, madera, metal. Y además, ni mancha ni corroe.