En el Barrio de la Concepción hay jardines que han quedado arrasados, según denuncian los vecinos. Son los del Parque Calero, que registra "minas" y orines en todas las zonas ajardinadas. “Hay muchos perros sueltos y metiéndose en zonas prohibidas y no todos recogen las deposiciones de sus mascotas”, dicen los vecinos a Buenos Días Madrid.
El que los perros corran sueltos por las zonas en que está prohibido y que sus dueños no recojan sus deposiciones ha contribuido decisivamente a que el parque Calero se haya deteriorado. “Tenemos que ir con cuidado con todo para no pisar las cacas”, señalan.
Los orines queman la vegetación
Cuentan que hace tres años plantaron césped y plantas en la mayor parte del parque pero que ya no queda nada por culpa de los orines de los perros que han quemado toda la parte vegetal que había. Aseguran que es un problema de incivismo por parte de los dueños porque “hay parque para todos, incluso para los perros porque el ‘pipican’ se puede ampliar”.
Señalan los vecinos que los dueños de los perros “desde el principio empezaron a usar las zonas ajardinadas para que sus animales hicieran sus necesidades y muchas de ellas no se recogen” pero que lo peor “son los orines que se quedan ahí” por eso “huele muchísimo a pis a bastantes zonas del parque”. Creen los vecinos que “las zonas comunes y ajardinadas son para el disfrute de todos no solo para los perros y sus dueños”.
Cabe recordar que el Ayuntamiento de Madrid se gasta 118 millones de euros en el mantenimiento de parques.