Los beneficios del kárate en la tercera edad son una realidad y se están fomentando cada vez más en las residencias de mayores de la Comunidad de Madrid. Buenos Días Madrid ha visitado una residencia en Humanes para conocer los beneficios del kárate en la tercera edad y ha asistido a una clase de este programa piloto.
La clase suelen tenerla al aire libre si el tiempo lo permite y se realiza con varios alumnos, entre ellos Pedro de 99 años que manifiesta con humor que “estamos empezando a aprender, pero si se acerca alguien por la calle le dejo chato”. Otro residente dice que “con 96 años que tengo creo que aún puedo dar un puñetazo a uno que le vuelco”.
Mejora la calidad de vida
Este programa se ha desarrollado por MueveSalud con el fin de mejorar la motricidad y aumentar el grado de autonomía de los residentes. Ángel, el monitor, dice que “la idea es darle un enfoque distinto a un deporte que en principio puede parecer que no está hecho para mayores, pero nada más lejos de la realidad. Y además busca que socialicen y que mejoren su calidad de vida. Una buena forma de rehabilitar las articulaciones es a través de estos ejercicios de defensa y de una forma más divertida”
Como beneficios adicionales, se potencian las relaciones sociales y el trabajo en grupo, mientras se mejoran las cualidades físicas básicas. Se trata de un sector muy vulnerable que, a raíz de la pandemia ha visto perjudicada su salud tanto física como anímica.
Animados y sin fatiga
El programa incluye el aprendizaje de técnicas básicas de karate como ataques con la mano cerrada y abierta, defensas, patada frontal e improvisación en función del estímulo.
Según sus datos: el grado de satisfacción fue del 100%, destacando que el 89% se encontraba más animado después de las sesiones y con un nivel de cansancio que no llegaba a fatiga.
Los residentes han destacado la mejora obtenida a nivel físico y anímico, y se han mostrado dispuestos a acudir a sesiones posteriores, disipándose las dudas iniciales que había en el grupo sobre la idoneidad del karate como un ejercicio para la tercera edad.