Con el termómetro disparado a los 36 grados este fin de semana en la comunidad valenciana, un grupo de 21 personas, la mayoría de ellas jubiladas, han llegado de Chinchón a sus segundas residencias de Benidorm.
“Vivimos en Chinchón y llegamos el pasado domingo, en cuanto nos abrieron nos vinimos” asegura Chari.
“Este hotel es nuestra segunda casa porque nos atienden de maravilla en primera línea de playa”.
Es un grupo que habitualmente va a ese hotel, llevan 15 años yendo allí, porque es muy familiar, está muy bien situado y tienen confianza con el director, Manolo.
"Se está fenomenal en Benidorm"
Dice Eugenio que cuando hay alguna oferta les llaman y aprovecharon el fin del estado de alarma para mandarles una.
“Vamos a estar aquí 15 días por lo menos porque se está fenomenal en Benidorm. Es mejor que ningún hotel”.
Para ellos es el paraíso porque está al lado de la playa. Llegaron el pasado domingo y se marcha este domingo próximo. Cuenta que no tuvieron fácil su organización porque tenían dudas de si el fin del estado de alarma terminaba el sábado o el domingo y también que contratar el autobús sin tener muy claro o no si alguna de las comunidades mantendría el cierre perimetral.
“Yo vengo con unos amigos de aquí porque yo vivo en Navalcarnero. Paseando por la playa y viendo a la gente. Tomando una o dos cervecitas”.
También hay madrileños de Móstoles y Cuatro Vientos, una representación de todas las localidades de la comunidad de Madrid, de playa y buen tiempo por Benidorm. “Pocas ganas de volver a Madrid la verdad”.
Playas parceladas
Ricardo se ha animado a darse un chapuzón temprano. “Nunca hemos tenido que bajar pronto a coger sitio”.
“Este año aún no han puesto las hamacas”.
El ayuntamiento de Benidorm ha ubicado pequeñas parcelas para mayor seguridad, “estamos cuatro, dos o una persona”.
“Está fresquita”
Los primeros en clavar la sombrilla, los madrileños.
En el grupo están todos vacunados con una o con las dos dosis y que con su llegada también han querido ayudar al hotel porque siempre se portan muy bien con ellos.
A 19 grados, “el agua está muy fresquita, pero me encanta”. Y bien que lo demuestran desde primera hora con el baño más esperado del año.