Al problema de las cocinas fantasma hay que sumar la apertura de un socavón en el asfalto que ha despertado la alarma en un vecindario del distrito de Tetuán.
Se trata de un agujero de unos 50 centímetros de diámetro, pero de una gran profundidad. Los vecinos han investigado y al parecer podría tratarse de un antiguo pozo o un túnel que conducía a un refugio durante la Guerra Civil.
No pueden dormir tranquilos desde que apareció el socavón el pasado día 20 de abril.
El subsuelo de esta parte de Tetuán, en la calle José Calvo, es como un gran queso gruyere, y por eso temen que pueda hundirse un tramo mayor de la calle, sobre todo si continúan su actividad diaria los camiones de reparto de las 31 polémicas cocinas fantasma que se encuentran en el número 10 de la misma calle.
Desde que apareció el socavón hace dos semanas nadie ha intentado repararlo. Bomberos y Policía se ha limitado a acordonar la zona.