La guerra comercial entre Estados Unidos y China ha dejado a Huawei sin las actualizaciones del sistema operativo Android ni aplicaciones como Google Play Store o Gmail. Una decisión que afecta a los nuevos terminales y que tiene una especial trascendencia para el mercado español.
Huawei es actualmente la marca que más teléfonos móviles vende en nuestro país, alcanzando una cuota de mercado de más de un 28%, superando incluso a Samsung, que históricamente había ostentado el liderazgo.
Huawei asegura que seguirá actualizando
Por su parte el gigante tecnológico Huawei ha asegurado este lunes que ha hecho "contribuciones sustanciales" al desarrollo del sistema operativo Android y que ofrecerá actualizaciones de seguridad y servicios posventa a todos sus equipos después de conocerse que Google dejará de vender componentes y software a la empresa china.
"Huawei ha hecho contribuciones sustanciales al desarrollo y crecimiento de Android. Como uno de sus socios clave globales, hemos trabajado estrechamente con su plataforma de código abierto para desarrollar un ecosistema que ha beneficiado tanto a los usuarios como a la industria", indicó la empresa china en un comunicado.
La compañía indica que continuará proveyendo actualizaciones y servicios posventa a todos sus equipos, tanto "a los que ya se han vendido como a los que están aún en almacenamiento".
Corte de suministros
Las principales empresas tecnológicas de Estados Unidos, entre las que se encuentra Google, dejarán de vender componentes y software al gigante chino de las telecomunicaciones Huawei, en repuesta a la directiva del presidente del país, Donald Trump, según fuentes citadas por Bloomberg.
Alphabet, la empresa paraguas de Google, ha decidido cortar sus suministros de material informático y algunos servicios de programación al gigante chino de las comunicaciones, según el mismo medio, que cita fuentes que pidieron el anonimato.
Igualmente, los principales fabricantes de procesadores, entre ellos Intel, Qualcomm, Xilinx Inc y Broadcom, han informado a sus empleados que dejarán de facilitar componentes a Huawei hasta nuevo aviso.
Trump y el supuesto espionaje
Estas decisiones se preveían desde que el pasado miércoles el presidente Trump declaró una emergencia nacional para prohibir a las compañías estadounidenses hacer negocios con empresas que supuestamente intentan espiar al país ni tampoco usar los equipos de telecomunicaciones que fabrican.
Dicha decisión, plasmada en una orden ejecutiva, se anticipaba que iba a perjudicar a compañías chinas como Huawei, considerada el segundo mayor vendedor de teléfonos inteligentes del mundo.
La orden ejecutiva no imponía automáticamente restricciones a la compra-venta de equipos de telecomunicaciones, sino que daba al secretario de Comercio de EEUU, Wilbur Ross, cinco meses para establecer qué compañías debían estar sujetas a las nuevas limitaciones por suponer un peligro para la seguridad del país.