"La tienda es horrorosa". Un vecino de la calle Santa Engracia expresa alto y claro la opinión que le merece la fachada pintada en colores fluorescentes de una tienda de colchones en la calle Santa Engracia, 66. La firma es Factory Colchón y está presente en varios puntos de Madrid.
Los llamativos colores de esta cadena se han convertido en objeto de polémica en varias calles de Madrid. Las tiendas están pintadas de colores chillones que rompen la armonía de los edificios y, en algunos casos, el problema va más allá de la pura estética porque las fachadas están protegidas.
Es el caso de la calle Bravo Murillo,300 y de Santa Engracia, 66. El Ayuntamiento han obligado a una tienda a devolver los colores originales del edificio gracias a las reclamaciones de los vecinos. Se trata de una fachada protegida de estilo neomudéjar levantado en 1925. La Asociación de Vecinos de Cuatro Caminos-Tetuán ha interpuesto una queja formal ante el Ayuntamiento.
La normativa establece que se debe cumplir que las texturas, técnicas y colores de los acabados, especialmente de los exteriores, sean los originales. El edificio de Bravo Murillo ya ha recuperado su color original y el de Santa Engracia está a la espera.
Alberto Tellería, vocal de Madrid Ciudadanía y Patrimonio, entiende que hace falta una regulación más específica de este tipo de edificios protegidos porque afecta al paisaje urbano, y sólo se actúa "cuando hay una denuncia". En el caso del edificio de Bravo Murillo se va a recuperar el color original "pero imaginemos que hubieran destruido algún elemento histórico original, se puede reproducir pero ya no sería el original", dice Tellería.