Los madrileños veneran a Jesús de Medinaceli, que recupera el besapié
Desde la pasada medianoche miles de devotos acuden al templo para cumplir la tradición ante el Señor de Madrid
"Vamos a pedir por las personas que están solas, que sufren o están enfermas", ha dicho Ayuso a su entrada a la basílica. Almeida ha pedido "aliento para el pueblo ucraniano, salud para los madrileños y trabajo para quienes no lo tienen"
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Miles de fieles de toda España participan hoy en el tradicional besapié a Jesús de Medinaceli, acto que regresa tras la pandemia en todo su esplendor, con la recuperada tradición de besar los pies a la imagen del considerado Señor de Madrid.
La basílica, en la plaza de Jesús, en el barrio de Las Cortes, está abierta desde la pasada medianoche para rendir culto al Cristo de Medinaceli. Cada hora se celebra una Eucaristía y ya desde primera hora de la mañana el interior de la iglesia ha estado repleto de devotos, venidos desde toda la Comunidad e incluso de otras regiones.
La tradición dice que el primer viernes de marzo hay que besar los dos pies de la imagen del Señor y que se pueden pedir tres deseos, de los cuales uno al menos se cumplirá.
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La misa solemne se ha oficiado a las 12 horas de este viernes, presidida por el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro. En declaraciones a Europa Press, el vicehermano Mayor de la Cofradía, Miguel Angel Izquierdo, ha destacado las "ganas" con la que llegan los devotos este año y sobre todo la "gratitud" que le expresan al Cristo "simplemente por poder estar aquí después de todo lo que ha pasado".
Según ha señalado Izquierdo, se debe a que el besapié ya se ha recuperado, "desde el 12 de noviembre con la Novena", y pese a que por la noche "ha habido menos afluencia de lo normal, en parte por las bajas temperaturas, la cola va en aumento y se va animando" hasta alcanzar ya la calle de Huertas.
Ayuso y Almeida
Muchos de los fieles llevan días haciendo cola para cumplir con la tradición, aunque este año no se han formado largas colas para entrar al templo, sino que el trasiego de personas ha sido bastante fluido, sin aglomeraciones.
La Reina Sofía o el alcalde de Madrid son algunos de los devotos que cada año visitan a Jesús de Medinaceli.
También ha acudido este mediodía la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quien ha pedido este viernes a Jesús de Medinaceli por aquellos que "sufren y están solos" y ha rogado por "el pueblo de Madrid y por toda España, para que todo vaya bien".
La presidenta regional ha llegado sobre las 13.45 horas a la Basílica de Jesús de Medinaceli para cumplir con la tradición de venerar y dar culto a la imagen del Cristo en el primer viernes de marzo.
Recibida con gritos de 'presidenta, presidenta' y 'Ayuso, Ayuso', la jefa del Ejecutivo autonómico ha recorrido a pie los últimos metros hasta la basílica de la plaza de Jesús levantando aplausos entre los centenares de madrileños que aguardaban en largas colas para acceder al templo.
Ayuso ha cumplido con la tradición y ha visitado a Jesús de Medinaceli y ha permanecido en la basílica durante una media hora, en la que se ha detenido frente a la imagen de Jesús de Medinaceli y ha visitado la capilla.
La presidenta madrileña ha conversado también con familias de la Fundación Madrina y otros devotos del santo que aguardaban en su interior y ha saludado a las autoridades. Al abandonar el recinto religioso, ha sido despedida con gritos de 'Isabel, Isabel' y se ha detenido con las personas que aguardaban para hacerse fotos.
Por su parte, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido este viernes a Jesús de Medinaceli "aliento para el pueblo ucraniano, salud para los madrileños y trabajo para quienes no lo tienen".
Así lo ha manifestado a su llegada a la Basílica del Cristo de Medinaceli para cumplir con la tradición de venerar y dar culto a la imagen del Cristo el primer viernes de marzo.
Se retoma así esta tradición tras la pandemia de coronavirus, que obligó a suspenderla para prevenir los contagios por Covid-19. "Retomamos esta tradición, y en mi caso como alcalde de Madrid vengo a pedirle lo mejor para esta ciudad, que nos acompañe y nos dé salud, trabajo y que siempre haya oportunidad de mejorar como sociedad", ha remarcado el primer edil ante los periodistas.
Ha descartado que ninguno de los tres deseos que se piden al Cristo tenga que ver con las elecciones municipales del 28 de mayo, ya que Jesús de Medinaceli "no vota" y "no hay que pedirle el voto; que se ocupe de todos los madrileños y no de los candidatos".
Las puertas estarán abiertas hasta que el último feligrés pase al interior del templo para cumplir con esta tradición centenaria.
Una imagen venerada
La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno pertenece a la Escuela Sevillana del taller de Juan de Mesa o alguno de sus discípulos. Fue tallada en la primera mitad del siglo XVII en Sevilla y llevada por los Capuchinos a la plaza fuerte de Mehdía o Mámora (Marruecos), para culto de los soldados españoles.
En abril de 1681 cae prisionera de los moros, la arrastran por la calles de Mequinez, y la rescatan los Trinitarios, llegando a Madrid en el verano de 1682, donde llega con fama de milagrosa. Ese mismo año se organiza la primera procesión a la que se dice asiste el "todo Madrid", pueblo fiel, nobleza y casa real.
Debido a diversos avatares históricos, la imagen ha recorrido varias iglesias de Madrid y en los años 1936-1939 fue trasladada a Valencia, Cataluña y Francia, para terminar en Ginebra (Suiza), participando juntamente con todo el tesoro artístico español en una gran exposición de arte en el Palacio de la Sociedad de Naciones.
Terminada la Guerra Civil regresa a su iglesia de la plaza de Jesús, en Madrid, donde es visitada continuamente por sus fieles y seguidores, entre los que se incluyen miembros de la nobleza y de la Casa Real.