Se acerca el primer viernes del mes de marzo, día en el que como marca la tradición los devotos del Cristo de Medinacelí podrán contemplarlo de cerca.
Esperando que llegue el momento ya hay fieles que acampan a las puertas de la basílica, en la calle Jesús.
El frío, que en especial de madrugada, estamos teniendo en Madrid, no desanima al grupo de personas que aguardan para venerar al Cristo con más devotos de la capital.
Provistos de mantas, abrigos y bufandas aguardan su turno para ser los primeros cuando en la medianoche de este viernes se abran las puertas del templo.