"Me tendré que ir porque esto es insoportable", la pesadilla de unos vecinos de Lavapiés con un narcopiso
En el número11 de la calle se encuentra el narcopiso más activo del centro de Madrid
Telemadrid ha estado en la zona desde primera hora de la mañana
Foto: TELEMADRID |Vídeo: Telemadrid
REDACCIÓN
"A todas horas, de madrugada, con violencia, se dan empujones, gritos, rompen y tiran cosas a la calle, incluso una puerta". Los vecinos de la calle Juanelo viven una pesadilla desde hace ya dos años. En el número 11 de la calle se encuentra el que posiblemente es el narcopiso más activo del centro de Madrid.
Denuncian situaciones de violencia, peleas, gritos, suciedad, ruidos... etc. Algunos tomaron la decisión de irse del barrio, otros se lo están planteando. "Llevo meses pensando en que me tengo que marchar de aquí", dice una vecina a un reportero de Telemadrid, "me tendré que ir porque esto es insoportable", insiste.
Telemadrid ha estado en la zona desde primera hora de la mañana de este martes y ha sido testigos de cómo diferentes personas se acercaban a 'pillar droga'. Los que viven en el piso han llegado, incluso, a increpar al cámara.
En una de las ventanas laterales los ocupas han establecido su propia ventanilla de venta de drogas. Está abierta las 24 horas del día y, según vídeos a los que ha tenido acceso Telemadrid, algunos de los que se acercan a comprar podrían ser menores.
Se trata de un bajo comercial ocupado por una veintena de personas. El tráfico de drogas, denuncian los vecinos, es continuo en el lugar. Dicen también que del edificio "salen olores a químicos". "Huele a droga constantemente pero no es marihuana, es una mezcla de marihuana y cosas químicas", explica la vecina " un olor que sube por el patio y es insoportable".
"No sólo vienen drogadictos o gente que está en la calle", cuenta esta vecina a Telemadrid. En este "supermercado de la droga" entran personas "de todo tipo", también "gente aparentemente normal y gente joven".
La situación dura ya tanto y las peleas son tan continuas que para los vecinos es ya algo habitual. "Me estoy preocupando porque estoy empezando a pensar que me estoy acostumbrado", dice esta vecina a Telemadrid.
El pasado mes de noviembre un hombre resultó herido con un cuchillo en el ojo en una de las peleas. En abril tuvo lugar una intervención policial. En diciembre el problema continúa. Dos familias se ha marchado ya del barrio en busca de lugares más tranquilos. Posiblemente no serán los últimos.