José Miguel González Martín del Campo, más conocido como Míchel, llega, a sus 57 muy bien llevados años, a un momento de su vida de completa estabilidad y felicidad. El '8' del Real Madrid y el '21' de la selección española recuerda "sin ninguna nostalgia", en 'Conversaciones con...', su inolvidable paso por el club merengue liderando junto a Butragueño la 'Quinta del Buitre': "Estoy encantado de, tantos años después, entrar en el corazón de mucha gente, pero lo vivido ya no se volverá a repetir".
La familia, su otra pasión
"Sabía que después de jugar al fútbol había otra vida. Yo en ese sentido siempre tuve los pies en el suelo", afirma el exjugador que nos cuenta que su vida ahora no ha cambiado mucho desde entonces, excepto lo de salir mucho en la tele: "Yo era como Beckham, pero mi mujer siempre ha cantado peor", comenta con humor.
Un abuelo feliz y orgulloso
Reconoce ser una persona extremadamente sensible, "sobre todo ahora a esta edad" y por eso aprovechamos para darle dos sorpresas en forma de mensaje: la de sus nietos Nico e Ignacio -en enero llega el 3º- y la de un 'hermano' que lo fue en el campo y más allá de él: el gran Rafa Gordillo, "alguien -dice Míchel- que todo equipo de fútbol debería tener en su organigrama".