El plasma frío de iones para combatir el coronavirus es lo último en tecnología para que restaurantes, colegios o grandes superficies puedan continuar con su actividad, reduciendo al máximo el riesgo de contagios. Se consigue con aparatos que limpian el aire de forma segura.
En López de Hoyos, en Madrid, está el primer restaurante que ha puesto en marcha esta tecnología para eliminar el coronavirus de sus estancias. Un restaurante que regenta Antonio, hermano de Victoria. Tras colaborar con el Ejército en la desinfección de lugares con coronavirus, se puso a pensar cómo hacerlo en restaurantes como el de su hermana ante la crisis que están padeciendo.
"Estos emisores de generación de plasma frío para combatir el coronavirus crean un campo de plasma que crea a su vez iones positivos y negativos que se juntan con los virus y los desactivan", dice a Telemadrid Antonio.
No perjudica a las personas
"Nuestro objetivo es que diéramos con algo que no fuera perjudicial en presencia humana", dice Antonio. La desinfección con ozono, por ejemplo, si es perjudicial para las personas y se tiene que realizar sin su presencia y con equipos de protección, algo que no requiere la tecnología de plasma frio.
"Son unos pequeños aparatos que se colocan al lado de los sistemas de ventilación y generan así los iones". Victoria dice que "lo he notado en los clientes del restaurante, pues mucha gente ahora que hace frío duda sobre si sentarse en las terrazas, me preguntan y cuando se lo explico se sienten seguros en el interior, tanto los clientes como los trabajadores".
Usado por el Ejército y certificado por Europa
El sistema "está certificado por Europa y estamos haciendo también pruebas con el INTA para en el futuro poder instalarlo en bares, colegios, centros comerciales u otros establecimientos", señala Antonio.
El aparato genera un campo de plasma y a medida que el aire fluye a través del campo las moléculas se cargan creando iones. Por ejemplo una molécula de agua se divide y lo deja en dos iones de hidrógeno y uno de oxígeno. Los oxígenos buscan electrones y cuando aterriza sobre un virus tira de ellos, matándolo y creando nuevas moléculas.
Destruye todos los patógenos
Los aparatos que Antonio distribuye se instalan en las unidades de climatización, por ejemplo, de restaurantes, como es su caso, pero también, grandes almacenes, grandes supermercados y también es aplicable a oficinas o residencias y colegios.
Son unos aparatos que generan millones de iones altamente cargados, unos positivos y otros negativos, que limpian el aire interior de cualquier local desactivando los virus, incluido el del coronavirus, pero también otros patógenos dañinos, moho, polvo y bacterias. También elimina humos y olores. Limpia el aire de forma segura, sin químicos ni productos dañinos.