La Comunidad de Madrid tiene al menos 410 jóvenes infectados por el viaje a Mallorca. Los brotes de coronavirus que han afectado a los estudiantes de varios viajes de fin de curso a Mallorca han seguido sumando positivos durante todo el fin de semana y registran ya cerca de 900 casos en varias comunidades, mientras que algunas, principalmente Cataluña y Galicia, notifican un empeoramiento en sus indicadores de contagio en la última semana.
Aitor Rubio, es un estudiante madrileño que está confinado en un hotel de Mallorca y dice que no ha salido de su grupo burbuja y no entiende por qué le han confinado y no les dejan volver.
“No hemos participado en grandes aglomeraciones, ni botellones, ni fiestas, y hemos llevado la mascarilla, no entiendo porque nos han traído aquí. No hemos dado positivo y en principio seguimos confinados dentro de las habitaciones, no nos dejan salir, nos traen la comida con bandejas”.
Asegura Aitor a Buenos Días Madrid que “no hemos tenido contacto con los trabajadores del hotel. “Nuestro grupo ha estado con mascarillas siempre y nos han metido en el mismo saco. Hemos podido hablar con nuestra familia sin problemas y a ver qué puede pasar”
Asegura Aitor que en el hotel donde está “de la consejería de Sanidad no hay nadie en el hotel y nadie sabe nada. Hemos mantenido las distancias, las mascarillas siempre y esperemos no quedarnos los 10 días”.
En este hotel mallorquín tienen confinados a un grupo de 21 estudiantes del Instituto Rey Pastor de Moratalaz y los padres tampoco saben muy bien por qué. Aitor asegura que no ha salido de su grupo burbuja de 8 estudiantes y que no se han mezclado con nadie.
Les han confinado porque han hecho la misma actividad acuática de otro grupo que ha dado positivo sin coincidir con ellos y ni siquiera el mismo día. Su grupo de 8 ha dado negativo en el test de antígenos y están esperando ahora el resultado de la PCR para ver si pueden coger el ferry hacia Valencia. Pero dice que, aunque den negativo, tampoco les aseguran que puedan salir.
Sus padres dicen que es un grupo muy responsable y que no todos han sido imprudente como parece que se está dando a entender. Aitor no se despidió ni de su madre ni de su novia por si acaso les contagiaba.
Se quejan de que el Gobierno balear les tiene un poco abandonados también en alimentación, para desayunar les dieron una manzana, una botella de agua y un sándwich y hasta las 6 de la tarde no les volvieron a dar nada, a algunos ni eso, galletas y un zumo.