Las explotaciones ganaderas de Madrid lo están pasando mal. Es el caso de Francisco Martín, ganadero en Torremocha del Jarama. Tiene unas 60 ovejas y corderos lechales que están dejando ya de ser lechales.
Todo por la crisis del coronavirus. El negocio está parado, la restauración no arranca. Es un producto de calidad al que no consiguen dar salida. Es un problema porque esos animales hay que alimentarlos, cuidarlos, mantenerlo sin que produzcan beneficio.
Los sectores ganaderos que están especializados en productos destinados a la restauración, como el cordero lechal, han visto cancelados todos sus pedidos de la noche a la mañana.
El ganadero anima a los consumidores a adquirir estos productos y prepararlos en sus domicilios, en el marco de una dieta saludable y equilibrada, más necesaria que nunca en estos días de cuarentena.