11 goles necesitaba España para superar a Holanda en la clasificación del grupo. Y los hizo, no 11, sino 12, puesto que Malta fue capaz de anotar un tanto. Así recuerda Camacho aquella histórica noche para el fútbol español.
A pesar de marcharse al descanso con 3-1, Camacho recuerda como Poli Rincón era el que más esperanza tenía, y trasladó su espíritu a todo el conujunto, que acabó consiguiendo la memorable gesta.