Carlo Ancelotti lamentó la severa derrota sufrida ante el Barcelona en la final de la Supercopa: “Nos deja muy tristes y decepcionados. Pero eso es el fútbol y con la tristeza nos vamos a casa. La tristeza nuestra es la tristeza de la afición. Lo sentimos mucho”.
Una disculpa que de poco sirve. En Fútbol es fútbol analizaron la crisis blanca y dieron con los culpables. El técnico italiano se queda entre la espada y la pared. No tanto por los resultados, sino por sus decisiones difíciles de explicar.
Afirmaciones como “a Ancelotti le tendría que costar el puesto”, “mira que me he hartado a defender a Ancelotti, pero se me han acabado los argumentos”, “dejadez por parte de los jugadores, dejadez en el planteamiento, mal planteamiento”.
"Hay que cambiarlo ya, porque esto va a ir a peor y él no lo va a arreglar” o “cuando tú haces la alineaciones para contentar a los que tienes en la plantilla pues pasa lo que pasa”·
Ancelotti se lleva casi todos los golpes, aunque hay más señalados: “A Lucas todos le queremos mucho, pero al Madrid le ha metido el Barça nueve goles en dos partidos y media docena han llegado por su banda”.
“Bellingham horroroso, Vinicius horroroso, el centro del campo horroroso”, “este equipo contra los grandes rivales no es equipo”, “entre que le ponga mala cara Asencio o Tchouameni, prefiere poner a Tchouameni y que la mala cara ser la ponga Asencio”
Carletto tiene varios problema: “Este equipo se le ha ido de las manos”. Y este tiene muy mala solución.