Marc Andre Ter Stegen ha adquirido una importancia capital en lo que va de curso, brillante en sus actuaciones y más determinante para el Barcelona que Thiboaut Courtois, intrascendente en los partidos del Real Madrid y trivial dentro de la crítica situación actual del conjunto blanco.
Una de las principales diferencias entre los dos protagonistas del clásico reside en la portería. El conjunto de Ernesto Valverde ha salido airoso de alguno de sus compromisos por la determinación de su portero. El alemán ha evitado marcadores dolorosos y ha aportado más de un punto a su equipo. Junto a Leo Messi ha sido el sosten azulgrana en lo que va de ejercicio.
Courtois
Nada que ver con Courtois. El belga, elegido el mejor guardameta del pasado Campeonato del Mundo, en Rusia, ha sido uno más en medio de la crisis que acucia al Real Madrid. El belga, casi el único fichaje de cierto relumbrón del equipo madrileño, no ha disfrutado de la aclimatación adecuada.
El meta de Bree, de 26 años, ha jugado siete partidos con el Real Madrid y ha encajado otros tantos goles. Su condición de mundialista dilató su estreno. Navas jugó ante el Getafe y el Girona. Courtois se puso bajo palos ya contra el Leganés, el Athletic, el Espanyol y después frente el Sevilla, Atlético Madrid, Alavés y Levante. Sus actuaciones pasaron desapercibidas.
Apenas ha sobresalido Courtois. Su papel ha sido irrelevante. Sin errores de bulto y sin paradas salvadoras. Una carencia por la que se critica al meta. Sobre todo cuando Ter Stegen o Jan Oblak, con el Atlético Madrid, están semana a semana en plena ebullición.
