Joao Félix fue titular en su debut con el Chelsea, y capaz de crear once situaciones de gol en 34 minutos, la media habitual del equipo en un partido completo.
Pero en el minuto 58, el ansia de recuperar un mal control le llevó a cometer una falta muy peligrosa que le costó la expulsión directa, y le acarreará tres partidos de suspensión.
El Chelsea acabó perdiendo por 2-1 y está décimo en la tabla. La roja a Joao Félix le costará más de dos millones al club, porque se calcula que cada partido del portugués está valorado en unos 800.000 euros. Un frustrante colofón a las 48 horas de vértigo que ha vivido Joao desde que desembarcó en Londres.