La taekwondista madrileña Adriana Cerezo se colgó la medalla plata en el Grand Prix de Roma, en la categoría de -49 kilos, después de caer en la final con la tailandesa Panipak Wongpattanakit.
Cerezo no logró una pequeña venganza ante la luchadora asiática, verdugo de la española en la final de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. La madrileña, campeona el año pasado en Roma, cedió 4-0 ante la favorita, una Wongpattanakit que logró su décimo oro de la serie.
Mientras, Cerezo mantiene su habitual posición en el podio este 2023, después de que la semana pasada se colgara el bronce en el Mundial celebrado en Bakú.
La madrileña tiene el ojo en los Juegos de París 2024, donde tiene ya casi garantizada su presencia por los buenos resultados que nutren su ranking olímpico.
La subcampeona en Tokio 2020 firmó la segunda medalla para España en la capital italiana tras el oro logrado por Adrián Vicente (-58 kg) el sábado.