Quique Sánchez Flores, entrenador del Getafe, reconoció que su equipo "no estuvo bien" la pasada jornada frente al Valencia, pidió "perdón" por la imagen mostrada en Valencia, a la vez que "un voto de confianza para el grupo", y se mostró esperanzado en estrenar el casillero de victorias en la Liga frente a la Real Sociedad.
El Getafe llega a este partido en puestos de descenso y herido por la imagen y la goleada encajada la pasada jornada en Mestalla frente al Valencia.
"Hemos intentado hacer borrón y cuenta nueva y enterrar ese partido lo antes posible. Un partido así es muy fácil de analizar sabiendo que cualquier cosa que analicemos está mal. Sólo me queda pedir perdón a nuestros aficionados y pensar en revertir la situación a base de entrenamientos, de recuperar la memoria y la base y adaptar jugadores", dijo Quique, en conferencia de prensa.
"Hay que recuperar lesionados y también la motivación de chicos que durante el verano han pensado que no formarían parte del proyecto y definitivamente sí están. Estamos más en la gestión de vestuario que en la gestión de campo", confesó Quique.
Esta semana, durante la presentación de Munir El Haddadi y Jordan Amavi, el director deportivo del club, Rubén Reyes, reiteró la confianza en el proyecto que dirige Quique Sánchez Flores junto a su cuerpo técnico.
"Nosotros estamos bien, no cambiamos la hoja de ruta. El trabajo realizado la temporada pasada fue bueno y llegamos a conseguir un equipo fiable y tácticamente muy rocoso e incómodo para los rivales. Hay que volver a la base de lo que ha sido el Getafe siempre. Un equipo que hace saltar la pelota, que mete pie y defiende hacia adelante sin tener miedo. Son cosas que en dos partidos fuera de casa no hemos hecho", declaró.
"No vamos a cambiar la intención de volver a lo que éramos. El grupo no es el mismo, pero cualquier cosa puede ser una excusa. En casa hemos hecho dos muy buenos partidos ante dos rivales importantes y esperamos encontrarnos con nosotros mismos. Somos comprensivos con la moral y las ideas de la gente respecto al equipo, pero yo les pido un voto de confianza para el grupo que está comenzando a formarse. Necesitamos a nuestra afición mientras dure el partido", manifestó.
Con un punto de doce posibles el Getafe necesita una reacción y mejorar muchos aspectos para lograr la primera victoria del curso.
"Lo más importante es la gestión de vestuario. Cuando un equipo falla en todo hay que buscar lo que está ocurriendo para que las mentes funcione. Hace falta enfocarse en la realidad y en el presente para poder ser disciplinados y combativos. Hay que intentar que las mentes salgan limpias y positivas al siguiente partido", señaló.
"Nos falta algo que no existe en el fútbol y que es tiempo. Los clubes piden tiempo a la hora de formar plantillas, pero el tiempo cuando se empieza a competir se consume muy rápido. Es un grupo muy nuevo que tiene cuatro chicos en las camillas, cuatro adaptándose y otros cuatro que han pasado por una pretemporada incómoda mentalmente porque no sabían si quedarían en el club. Cuando sales al terreno de juego si falla uno se compensa y cuando te fallan tres vas a perder seguro. O vamos todos a una o somos todos más débiles", comentó.
El rival de esta jornada es la Real Sociedad, que llega a la cita reforzada tras vencer en la Liga Europa al Manchester United en Old Trafford.
"Es un rival difícil. Está en la clase alta de la liga desde hace bastantes años con un trabajo espectacular de Imanol. Tienen un estilo muy reconocible y los jugadores que incorpora son de ese estilo. Juegan y defienden bien. Buscaremos las rendijas para llevar el partido a lo que nos conviene y hacérselo a ellos lo más incómodo posible", apuntó.
Por último, Quique Sánchez Flores habló sobre las expulsiones que están lastrando el rendimiento del equipo en estas primeras jornadas.
"La competición es así. El Getafe tiene que meter el pie. Tenemos muchas tarjetas para lo poco agresivos que hemos sido en dos partidos. Somos un buen equipo cuando al final del partido hemos acumulado faltas y agresividad bien entendida. Tenemos que ser agresivos dentro de los límites y en las situaciones del juego que lo merecen", concluyó.