Zinedine Zidane se mantiene tranquilo, "No estoy preocupado por nada", ha dicho el entrenador del Real Madrid.
Sobre él recae una importante responsabilidad, pero la realidad es que no está siendo un arranque sencillo en la Liga de Campeones, de hecho se puede hablar del peor. Para hablar de un inicio similar hay que remontarse 17 años atrás, en la temporada 2002-2003.
El Real Madrid arrancó en Europa con una derrota y un empate. Igual que esta campaña, PSG(3-0) y Brujas(2-2), pero con la única diferencia de los goles. Ya que ante el Milan entonces cayó tan solo por 1-0 y ante el Lokomotiv de Moscú empató (2-2).
Un precedente preocupante, pero tranquilos, la nota positiva es que el Real Madrid pasó esa fase de grupos. Una gesta complicada, difícil si nos basamos en los datos, ya que solo un 20% de los equipos que comienzan así acaban pasando de fase.
Fase de grupos que, por cierto, en la que nunca ha caído el Real Madrid. Para no hacerlo este año, los de Zinedine Zidane se enfrentan a cuatro finales.
La próxima parada es, según algunos, el infierno de Estambul ante un Galatasaray liderado por Falcao y que conoce muy de cerca al equipo de Chamartín.
El equipo blanco no gana en Champions desde el 2 de febrero ante el Ajax en su casa, desde entonces acumula tres partidos consecutivos sin vencer. Una dinámica que los de Zidane tiene que romper si no quieren escribir el peor capítulo blanco en Europa.