Parecía una realidad inmediata de que Gareth Bale abandonara el Real Madrid durante el pasado verano incluso públicamente Zinedine Zidane le sentenció.
Pero mucho han cambiado las cosas desde el 21 de julio. Bale ha pasado de odiado a héroe tras su arranque de temporada. "Me centré en mi mismo sin saber donde iba a ir, mantener la cabeza baja", señala el galés.
El galés recupera su confianza
Mentalidad con la que ha recuperado su confianza, aunque no tanto la del club. Los blancos temen que Bale vuelva a las andadas, a las excusas físicas con lesiones, que en ocasiones, han parecido forzadas. A su falta de interés, de compromiso y a su fijación por otros deportes, como el golf.
Una actitud que se ha repetido en las últimas temporadas. No olvidemos aquella famosa protusión en 2016, pero que parece haber revertido tras los acontecimientos del último verano.
Aunque es convincente tanto fuera como dentro del campo, el Real Madrid no termina de confiar en él y su plan durante los próximos meses es recuperarlo pero para sacarle el máximo partido de cara a su venta en el mercado invernal.