La transición que le falta al Atlético se llama gol
Efe
Derrotado una vez más -y ya van diez en dieciséis partidos en Liga en los ocho años con el argentino DiegoPablo Simeone al frente- por el Barcelona en un amargo encuentro en el Wanda Metropolitano decidido por Lionel Messi(0-1), el Atlético vuelve a hacer recuento de daños con una palabra clave: transición.
No por novedosa, pero sí por sintomática justo después de una derrota ante un rival directo, la idea que deslizó el técnico rojiblanco de que el actual es "un año de transición" en una entrevista televisiva nada más acabar el encuentro corrió como un reguero de pólvora entre los reporteros y la opinión publicada.
"Tengo la tranquilidad de que el equipo dio todo, de que están trabajando con lo que el entrenador le pide y ya llegará el cambio de que, en vez de que dé en el palo o que la saque el portero, entrará. Así que hay que tener paciencia, tranquilidad, saber en el año de transición en que estamos", apuntó Simeone.
La idea del año de transición, o del "año más difícil" por la profunda renovación que ha tenido que asumir el Atlético con las salidas de piezas clave como Antoine Griezmann, Diego Godín, Filipe Luis, Juanfran Torres, Lucas Hernández o Rodrigo Hernández, no es nueva en el argumentario de Simeone, que la ha repetido en varias ocasiones durante estos primeros cuatro meses del curso.
Lo que sí es distintivo de esta temporada, donde la transición está siendo realmente más dura para el Atlético, es en el apartado goleador, porque la versión actual del conjunto rojiblanco es la que menos goles marca a estas alturas en LaLiga desde que el entrenador argentino asumió el cargo.
Son solo 16 goles a favor para el Atlético en el campeonato liguero, una cifra que solo empeoran seis equipos en el campeonato -los que ocupan las últimas seis plazas de la tabla-, y con mucho el peor registro anotador del equipo en la era Simeone, que en 15 jornadas tenía en los 21 goles de la pasada temporada 2018-19 su peor cifra, cuando tenía tres puntos más (28, por los 25 actuales).
Muy lejos de los 40 goles que llevaba a estas alturas en el año del título liguero (2013-14, cuando era segundo de la tabla con 40 puntos), de los 35 del año anterior, primero con Simeone iniciando el campeonato, los 28 de la 2016-17 o los 27 de la 2014-15.
Tan solo la solidez defensiva, con apenas 10 goles encajados, los mismos que el año pasado en esta misma jornada, permite al Atlético mantenerse en la pelea por la cabeza de la clasificación, ahora a seis puntos tras caer contra el Barcelona, los mismos que tenía en la campaña 2016-17 a estas alturas. Entonces llegó a pelear el título y acabó tercero, con seis puntos sobre el cuarto (Sevilla).
Todo esto conduce a la primera parte de la afirmación del entrenador, la que apuntaba a la necesidad de que las ocasiones marradas o detenidas por el portero -anoche por un inspiradísimo Marc André ter Stegen, milagroso en las ocasiones de Mario Hermoso y Álvaro Morata en la primera mitad-, entren para cambiar la dinámica.
Esa parece ser la transición más urgente para un Atlético que en la noche del domingo sí generó ocasiones, remató 17 veces a puerta y estrelló un balón en el poste. Más méritos que los que había acumulado ante el Granada en la jornada anterior (1-1) o ante el Juventus en la Liga de Campeones, donde tuvo posesión pero no inquietó al meta rival tanto como sí hizo anoche.
Pero los tantos no acaban de llegar, y ante eso el preparador rojiblanco advirtió que están "buscando soluciones". "Los únicos caminos para ello es tener situaciones de gol y creo que las hemos generado. Esperamos que Joao Félix agarre más ritmo, el trabajo de Correa fue encomiable, el de Morata fue fantástico", dijo.
Un Simeone que dejó deslizar la posibilidad de un refuerzo -"Hasta que no pase nada que le podamos contar, trabajar con los futbolistas que tenemos, que son muy buenos", apuntó al ser preguntado por este asunto-, y recuperó un adagio que le debe sonar al aficionado de otros años: que el objetivo es el puesto de Liga de Campeones para la campaña siguiente, al alertar de los cinco puntos que les lleva de ventaja el Sevilla tras esta jornada.
Vistos los datos y las percepciones, el camino al gol parece ser la verdadera transición que afronta un Atlético que no hace tanto, se recuperó de una situación similar en puntos y posición clasificatoria para pelear el campeonato liguero. ¿Será capaz de hacerlo de nuevo esta temporada?