Minerva Piquero nos descubre, con ayuda de la tecnología de realidad virtual los campos y huertas de Madrid. ¿Cuáles son los vegetales y frutos que toca plantar de cara al verano? ¿Qué productos son típicos en cada zona?
La respuesta a la primera pregunta está principalmente en el calabacín, el melón y la sandía. Necesitan tener muchas horas de sol y un suelo bien drenado.
Para dar solución a la segunda pregunta, la primera parada nos lleva a Villaconejos. Su producto estrella son los melones, sobre todo la variedad del melón autóctono mochuelo que tiene la carne más suave y blanca.
Esto se debe a los niveles de potasio de las fértiles tierras que abundan en la Comarca de las Vegas y que le proporcionan al melón un poquito más de azúcar.
Si vamos a Chinchón triunfan los ajos, ingrediente fundamental en nuestra receta mediterránea. Regados por el río Tajo, son tan especiales por las tierras calizas, sueltas, saneadas y profundas en donde crecen.
Además, las ajeras de Chinchón mantienen la tradición intacta del cuidado del limpiado y el ataviado del ajo que ha pasado como sabéis de generación en generación.
Nuestro recorrido nos lleva directos a la coliflor de Griñón. Esta hortaliza, que muchos prefieren evitar por ese olor que tiene un poquito fuerte al cocinarla, es el producto estrella de la localidad. La combinación perfecta del clima, la tierra y el agua es lo que hace que tenga este sabor tan especial.
En Aranjuez no solo hay que visitar su palacio, las fresas van tiñendo de rojo sus huertos. Ahora en primavera, esta fruta necesita un clima un poco más templado, el del sur de la Comunidad de Madrid.