En las adicciones, hablamos de sustancias legales, pero también ilegales. En el apartado de las ilegales el cannabis sigue siendo la más utilizada. En 2022 el 40,9% de la población reconocía haber consumido esta sustancia alguna vez en la vida, el 10,6% en los últimos 12 meses, el 8,6% en los últimos 30 días y el 2,8% a diario en el último mes.
“Son los jóvenes, de nuevo, los que más consumen cannabis, en concreto la franja de edad de entre 15 y 24 años”, apunta el doctor Gonzalo Herradón Gil-Gallardo, decano de la facultad de Farmacia en la universidad CEU San Pablo. No podemos afirmar que haya un consumo seguro de cannabis. El uso diario o casi diario, el inicio del consumo en la adolescencia y el uso de cannabis de alta pureza están asociados con mayores riesgos de dependencia, problemas de salud mental y efectos adversos en el desarrollo cerebral.
Como señala el doctor Gonzalo Herradón, “hay muchos mitos y falsas creencias que se han creado alrededor del cannabis. Por ejemplo, que es una sustancia natural, ecológica, con efectos terapéuticos o menos perjudicial que fumar tabaco, a los que se les suman los intereses comerciales de empresas centradas en la comercialización de productos”. Las drogas siempre comportan un riesgo muy importante para la salud, y el cannabis no es una excepción.
