La presidenta regional, Cristina Cifuentes, ha defendido los principios de la Constitución y ha dicho que si hay que ser críticos, los reproches no deberían dirigirse contra la Carta Magna sino contra "determinadas conductas que no han estado a la altura" y han causado "desapego" de los ciudadanos a las instituciones.
"No deberíamos dirigir nuestro reproche hacia la Carta Magna, que plantea un horizonte estimulante de vida en común, y nos hace mejores como sociedad y como país", ha dicho, durante su discurso en la recepción que ha dado la Comunidad de Madrid con motivo del Día de la Constitución, un día "integrador" que manifiesta la "unidad" de todos los españoles.
Cifuentes ha señalado que esta legislatura "de acuerdo y de mayor transparencia y cercanía a los ciudadanos" responde precisamente a los valores que inspiran la Constitución "entendida como un marco flexible y duradero, basado en principios que no caducan: la libertad, la justicia, la igualdad o el pluralismo político".
Ha admitido que hay aspectos parciales que podrían "ser objeto de adaptación, de reforma y de mejora", pero no así las "grandes cuestiones", como la forma de Estado, el modelo territorial y el sistema de derechos y deberes, en los que la Carta Magna "acierta y merece un apoyo sin fisuras de todos los demócratas".
La presidenta ha recalcado que la Constitución de 1978 "es mucho más que un texto legal", es "una forma de convivir nacida del respeto, la tolerancia y la cooperación", el "punto de equilibrio" para "llegar a acuerdos y renunciar a extremos". "Y todo lo que sea apartarse de ese equilibrio para tratar de imponer un programa particular será ajeno al verdadero espíritu del consenso constitucional", ha avisado.
Bajo su punto de vista, la evolución de la Comunidad de Madrid durante sus más de 30 años de vida "es la mejor demostración del enorme potencial de desarrollo que nuestra Constitución hace posible en todas las comunidades autónomas, y lo que es más importante: en sus principios rectores de la política social y económica se encuentra una guía para superar todo tipo de obstáculos, como la grave crisis que ahora empezamos a dejar atrás".
La presidenta ha señalado que su Gobierno trabaja para fortalecer y extender el Estado social del que los españoles quisieron dotarse en el artículo 1 de la Constitución, para "favorecer la cohesión de la sociedad y no dividirla".
"Todos los presidentes y los gobiernos autonómicos, sin excepción alguna, hemos recibido ese mandato", ha recordado, y por eso "tenemos la obligación de asumir la responsabilidad añadida de actuar como leales representantes del Estado en nuestros respectivos territorios".
"Sin embargo, hoy hay una parte consustancial a España, patria común e indivisible de todos los españoles, que está siendo sometida a una intolerable presión para quebrar la legalidad y ser arrancada de nuestro país", ha criticado, antes de celebrar el fallo del Tribunal Constitucional contra la declaración del Parlamento catalán.
Para Cifuentes, la Constitución no sólo habla de derechos y libertades, también de símbolos que encarnan esos valores y la historia común, como la bandera, enarbolada como "referente de unidad y orgullo" en otros países, y ha puesto como ejemplo Francia tras los atentados de París.
Una bandera "que asegura que lo que es España lo decidimos entre todos, y que nadie, individual y unilateralmente, puede apropiarse de esa responsabilidad compartida que llamamos soberanía nacional", ha explicado.
Recuerda también esa bandera que España es un estado "garantista y riguroso frente a quienes abogan por la fuerza de los hechos consumados", y que resume "cientos de años de historia, de convivencia, de sufrimientos y de logros en común", además de simbolizar "las libertades y derechos conquistados".
"Debe servirnos para evitar los errores del pasado, haciendo posible que entreguemos a las generaciones futuras un país próspero y en libertad", ha insistido, una bandera "de todos los españoles que creemos en la democracia, en la convivencia, en la igualdad sin privilegios y que confiamos en nuestras instituciones para superar cualquier desafío al orden constitucional", ha dicho, antes de concluir con vivas a España y a la Constitución.