La ciudad de Madrid es la capital española donde más multas se ponen, según un estudio realizado por la Fundación Línea Directa que analiza más de 675.000 multas de tráfico impuestas por las diferentes Administraciones Públicas.
Según las cifras, los Ayuntamientos españoles multan hasta cinco veces más que la Dirección General de Tráfico. De hecho, la Administración central aporta solamente el 14 por ciento de las sanciones de todo el territorio nacional, mientras que los Ayuntamientos suponen más del 76 por ciento.
Pese a la creencia general, el 70 por ciento de las multas de tráfico impuestas por los Ayuntamientos españoles están directamente relacionadas con la Seguridad Vial y tan sólo el 30 por ciento, con la movilidad o el aparcamiento, lo que destierra el mito de que las multas se imponen fundamentalmente por razones recaudatorias.
Además, los datos de accidentalidad no acompañan a los conductores: desde 2011, el número de accidentes con víctimas en las zonas urbanas se ha incrementado un 20 por ciento y el número de fallecidos sólo ha descendido un 3,5 por ciento en las ciudades frente al 22 por ciento registrado en las carreteras.
Estas son algunas de las principales conclusiones del estudio 'Multas, *recaudación o reeducación? Sanciones de tráfico en los Ayuntamientos españoles (2011-2014)', presentado hoy por la Fundación Línea Directa. El estudio se completa con una encuesta realizada a 1.700 conductores de toda la geografía nacional que recoge la percepción de los españoles sobre este tipo de sanciones.
La Fundación Línea Directa ha elaborado un ranking con los consistorios que más multan. Para ello, ha establecido un criterio de proporcionalidad entre el número de sanciones impuestas en cada capital de provincia y los conductores que la compañía Línea Directa tiene en cada ciudad.
El resultado arroja aspectos sorprendentes, ya que aunque las dos capitales donde más se multa son Madrid y Barcelona, respectivamente, ciudades como Palma de Mallorca o Granada aparecen a continuación. En el lado contrario se sitúan Cáceres, Badajoz y Jaén, donde las multas de tráfico son la excepción.