Víctor Gutiérrez y Rocío Saiz ponen voz a las fiestas del Orgullo
Cultura, música y deporte se unen en esta semana multicolor donde la diversidad y la igualdad son las protagonistas
Foto: Redacción |Vídeo: Telemadrid
El sábado es la manifestación de la fiesta del Orgullo LGTBI. Hombres y mujeres orgullosos y orgullosas de su condición que celebran la libertad y la diversidad en un Madrid universal donde lo importante son las personas. Gente como el deportista Víctor Gutiérrez o la cantante Rocío Saiz ponen voz a esta celebración.
Víctor Gutiérrez es miembro de la selección masculina de waterpolo y se ha propuesto convertirse en todo un referente en el activismo LGTBI del deporte. De hecho, él fue el primer deportista de élite español que reconoció abiertamente su homosexualidad.
“Visibilizar la homosexualidad en el deporte es muy importante, porque lo que no es visible es como si no existiera”, nos explica el waterpolista. “Yo crecí sin referentes positivos. De pequeño pensaba que nunca podría llegar a la élite del deporte porque no veía a nadie como yo”.
Víctor decidió compartir su condición de deportista gay para lanzar el mensaje de que “se puede llegar a la élite de un deporte siendo homosexual. Hay que perder el miedo. No merece la pena vivir detrás de una careta o encerrado en un armario”.
El jugador de waterpolo es uno de los deportistas más activistas con los derechos LGTBI y su objetivo es el de romper el tabú de la homosexualidad dentro del deporte. Y aunque el camino es largo, parece que va surtiendo efecto.
“Madrid es la ciudad más orgullosa, más gay-friendly del mundo, con mucha diferencia”, nos cuenta un deportista que ha viajado a muchísimos lugares debido a su profesión. “Hay mil cosas que se pueden mejorar, con en otras partes, pero la sensibilidad que hay aquí, la normalización y la sensibilidad son únicas”.
La cantante Rocío Saiz también comparte este sentimiento por la capital española. La artista ha participado en la exposición Cultura reflejo de todos con su tema Autocensura, el primer single de su disco Amor amargo.
Rocío la describe como “una canción muy importante para mí porque habla sobre no permitirnos amar a quien queremos, no permitirnos ser como somos, censurarte y autoboicotearte para que te contraten en un trabajo, para que la gente te quiera, para encajar en grupos sociales”.
Cultura, música y deporte se unen en esta semana multicolor donde la diversidad y la igualdad son las protagonistas.